Los beneficios de la tecnología moderna en nuestras vidas diarias son inmensas y muchos de nosotros no puede imaginar la vida sin nuestros gadgets, como por ejemplo, teléfonos inteligentes, tabletas y computadoras portátiles. Desafortunadamente, a medida que más y más tiempo se usa para interactuar con la tecnología moderna, han aparecido algunos trastornos y síndromes con anterioridad raros o incluso desconocidos.
Síndrome del pulgar/dedo
Se trata de una afección que afecta las articulaciones y los tendones. En su momento dejo perplejos a los doctores que no entendían el rápido aumento de casos de dolor, sensación de cosquilleo y dolor en los nudillos. Luego se encontró la relación entre el aumento del uso de los viejos celulares de 9 teclas para llamar y las lesiones. Lamentablemente, incluso con la aparición de teclas touch el problema persiste porque nuestros dedos no están preparados para raspar tanto una superficie por lo que ahora los casos de moretones y hematomas en pulgares son los más comúnes.
Desorden de muslo por el uso de laptops
Con la popularidad de los equipos portables (laptop, phablet, notebook, macbook) ganándole mercado a las computadoras de escritorio, cada vez más y más personas se ven afectadas por este mal. El problema surgen cuando las personas usan sus equipos apoyados en los muslos a una temperatura muy alta (42 grados o más, una temperatura relativamente promedio para un equipo estándar) y puede causar desde una simple magulladura o leve quemadura hasta problemas reproductivos. El nombre técnico de este problema es Erythema ab igne.
Nomophobia
El término “nomophobia” es una contracción de las palabras en inglés “no-mobile phobia” o lo que es lo mismo “fobia a no tener el móvil”. El síndrome presenta síntomas de mucha ansiedad y temor cuando la persona pasa mucho tiempo alejado de su teléfono celular. El problema es ciertamente real, aunque parezca un capricho adolescente, y ya tiene su lugar en el manual de diagnóstico psiquíatrico DSM V
Efecto Google
Se se llama así a la pérdida de capacidad de retener información a medida que las nuevas generaciones se acostumbran a buscar cosas en Internet en lugar de recordarlas por cuenta propia. No necesariamente se trata de algo problemático, pero sin dudas se trata de una perdida efectiva de la capacidad para recordar información.
Depresión Facebookera
De acuerdo a algunas investigaciones, como la de la Universidad de Michigan, existe una relación entre el tiempo que se pasa en Facebook y la posibilidad de sufrir depresión. Según los investigadores, las personas usan las redes sociales para publicar mayoritariamente noticias positivas o comentarios favorables a si mismos, lo que produce un sesgo en la interpretación de otros usuarios que creen que su vida es mucho peor y por lo tanto se deprimen.
Fuente: InfoTechnology