El capítulo 252 de IngenieroWhite.Com, contó con la visita en los estudios de La Brújula 24 de Patricio Sangineto, reciente entrenador del plantel superior de básquet del Club Comercial, quien nos contó su historia de vida y sus vínculos con la entidad portuaria.
“Con respecto a mi salida de Comercial, digo que los días venían siendo muy largos, arrancaba a las 7 de la mañana y llegaba a mi casa a las 11 de la noche después del entrenamiento, y me estaba costando bastante. Fue una decisión consensuada con los médicos, así que bajé un cambio y decidí tomarme las cosas un poco más tranquilo”, aseguró Sangineto.
Más allá del aspecto deportivo, el 2017 no fue un año más para el Pato desde el punto de vista personal: una afección cardíaca lo obligó a pasar por el quirófano.
“Fue bastante duro cuando me lo comunicaron y uno lo primero que piensa es en llorar. Tenía 3 arterias tapadas y uno sabe que cuando lo tienen que operar del corazón no es lo mismo que la rodilla; es el motor de todo. Lo bueno es que estaba fuerte de la cabeza y si pasaba la cirugía no me iba a parar nadie; por suerte tuve una recuperación bárbara”, reconoció.
–Hablando de tu regreso a la rutina, ¿prácticamente lo hiciste a la par del equipo en la cancha?
–La verdad que sí. Me operé el 7 de marzo y a fines de ese mes ya dirigí mi primer partido. Lo primero que le pregunté a los médicos fue cuándo podía volver a dirigir para distraerme. Lo que pasa que uno se acelera en los partidos y eso también hay que tenerlo en cuenta.
–Dejando de lado este presente, ¿cómo nació tu vínculo con el básquet?
–Me crié en Estudiantes y ya a los 15 años empecé a dirigir a la categoría mini. Me la pasaba todo el día en el club y cada vez me fue gustando más. Con el tiempo, dirigí en Olimpo, Pacífico, El Nacional, Sportivo, Velocidad y en San Antonio Oeste. La idea era no volver a dirigir más, hasta que me crucé con Marcelo Díaz y decidí venir a dar una mano en este momento de transición.
“En Comercial había estado en 2005, donde trabajé en formativas con muchos jugadores del plantel actual, como Ramiro Riviere, y referentes del club, como Amílcar Andreanelli. En parte, me motivó volver al club esos recuerdos y ayudar a Comercial en esta etapa de reordenamiento”, agregó Sangineto.
–¿Lo viste cambiado al club de una etapa a otra?
–Comercial es un club especial. Es un club que lo comparo en algún punto con Villa Mitre, en el sentido de que los hinchas defienden mucho sus colores. Por cuestiones laborales, además, conozco a mucha gente de White y he formado lazos muy lindos con gente conocida, como el caso de la familia Andreanelli.
“Comercial es un club que tiene todo para crecer y es cuestión de unificarse y tirar todos para el mismo lado”, tituló.
“De cara a lo que viene no creo que vuelva a la cancha. Ahora es tiempo de que los chicos estén tranquilos y los de afuera podamos alentarlos”, concluyó.