Una familia de cuatro integrantes necesitó en septiembre un ingreso de $70.532 para no ser considerada pobre, ya que el costo de la canasta básica subió 3,2%, informó el INDEC.
El mismo grupo familiar requirió un ingreso mínimo de $30.014 para no ser considerado indigente, registrando una suba del 2,7% contra el mes anterior.
La suba mensual de la Canasta Básica Total (CBT), que define el nivel de pobreza, se ubicó por debajo de la inflación del mes del 3,5%.
En la comparación interanual la CBT registra un aumento del 49,4 y desde diciembre pasado el alza llega al 28,7%, ambas mediciones por debajo de la variación del alza de precios minorista en el mismo período.
La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que define el nivel de indigencia creció un 54,5% en el último año, por encima de la inflación del 52,5% y aumentó en los primeros nueve meses un 32,4%, por debajo del costo de vida del 37%.
Según las cifras oficiales, una familia de cinco integrantes requirió un ingreso de $74.184 para no encontrarse en situación de pobreza.
Para el grupo familiar de tres miembros los ingresos debieron llegar en septiembre a los $54.422, para eludir la pobreza.
Para no ubicarse en situación de indigencia una familia de cinco miembros debió tener un ingreso mensual de $23.894 y de $31.567 en el caso de una familia de tres integrantes.
En el caso de un adulto mayor, el valor de los ingresos mensuales en septiembre para no ser pobre debió ser de $22.826, y para no caer en la indigencia de $9.713 (NA).