YPF necesita unos 40 millones de toneladas de arenas silíceas para Vaca Muerta, material que viene siendo importado desde Estados Unidos, Brasil y China, a un costo de 1.500 dólares la tonelada.
De ahí la decisión tomada en 2014 de adquirir una mina en Chubut para mejorar las operaciones y maximizar recursos.
Se trata de un negocio millonario capaz también de generar no pocos puestos de trabajo y así lo entienden en la mencionada provincia patagónica, donde ya se mueven por lograr el mayor rédito posible.
Hasta ahora el puerto local se encuentra frente a un enorme negocio que podría amortiguar el duro golpe que significó la caída del proyecto minero de la empresa brasileña Vale, sobre todo por las perspectivas concretas que supone, en materia de tráfico marítimo, el interés de YPF por traer a Ingeniero White la arena especial que necesitan los pozos de Vaca Muerta.
Aún sigue firme la posibilidad de transportarla por camión desde la mina ubicada en Dolavon–Gaiman hasta Puerto Madryn y, desde allí, seguir en buque hasta White, desde donde será llevada en tren hasta Añelo, en las puertas mismas del megayacimiento de petróleo y gas no convencionales.
Esta iniciativa compite con otra que consiste en transportar la arena desde la mina chubutense en camión hasta la localidad de Darwin, para continuar por tren hacia Contralmirante Cordero (ambas localidades en la provincia de Río Negro) y por camión nuevamente hasta Añelo (Neuquén).
Si bien inicialmente, y por cuestiones de urgencia, el movimiento se haría por camiones, todo parece indicar que esta modalidad ha perdido terreno frente a la posibilidad de utilizar el transporte naval hasta Bahía Blanca y luego el ferrocarril, sobre todo por los mayores costos y efectos perjudiciales que podría originar semejante movimiento diario de vehículos de gran porte por las rutas.
Incluso, ante una consulta de este diario, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, respondió que el plan bahiense era absolutamente viable, sobre todo porque abaratará de manera sustancial el costo del traslado de la arena (un 36% menos), al emplear barcos y trenes en lugar de camiones, aspecto este que resulta vital para YPF y sus posibilidades de desarrollar Vaca Muerta en un escenario internacional con precios del crudo por debajo de las expectativas.
“Se habló con los directivos de YPF sobre la posibilidad de construir un tendido férreo de 75 kilómetros entre Cordero -hasta donde hoy hay vías- y Añelo, en las puertas de Vaca Muerta. Los estudios de prefactibilidad dieron bien y pensamos que esta vía se puede hacer el año que viene”, dijo Randazzo.
En la Patagonia ya se mueven
Sin embargo, no todas son rosas para la alternativa bahiense. Ahora en Chubut comenzaron a pedir la construcción de un ferrocarril desde Trelew a San Antonio para transportar las arenas.
El diputado provincial Carlos Gómez consideró necesario que haya un “tren de carga que vaya desde Trelew hasta San Antonio (Río Negro)” para transportar el recurso natural destinado al fracking y, a su vez, que sirva para reactivar el Parque Industrial de Trelew.
“Vaca Muerta necesitará para los próximos años toneladas de arena silícea para explotar los yacimientos no convencionales” y recomendó que la discusión no debe centrarse en si YPF debe llevarse o no la arena, sino en cómo se le puede agregar valor”, sostuvo el legislador.
“La excusa de la arena silícea, más allá de lo que le pueda dejar a los municipios y a la provincia, es ver la posibilidad de que se habilite ya un tren”, señaló el diputado.
Gómez consideró que es necesario para esa provincia contar con un transporte con el objetivo de que el recurso no llegue a Bahía, porque de esa manera generaría mano de obra en la ciudad bonaerense y no en Trelew.
“En vez que te lo lleve un barco a Bahía y le dé laburo a Bahía Blanca, metele el tren acá y dale trabajo a Trelew, a Rawson”, cuestionó. (Por Adrián Luciani; La Nueva).