De hecho, la mujer compartió con la redacción de La Brújula 24 algunas imágenes que dan cuenta de sus dichos. “Necesito ayuda, son dos pisos y tengo miedo de que se venga todo abajo”, aseveró indignada.
Y agregó: “Me dijeron que tiene peligro de derrumbe, pero nadie hace nada. Se lavan todos las manos. Esto se venía rajando de a poco hasta que en enero se detonó y cada días es un poco más. Me mandaron un ingeniero de la Municipalidad y nos dijo que no podemos vivir más acá”.
“Nos mandaron a hablar con el delegado y después a esperar que cambien delegado, y acá seguimos esperando”, cerró.
Fuente: Gentileza La Brújula 24.