El desembarco de la empresa norteamericana Uber en la Argentina, cuyo servicio consiste en ofrecer una aplicación móvil que une a conductores particulares con pasajeros que requieren de un vehículo, despertó este lunes la furia de los taxistas porteños, que prometieron resistir la presencia de esa compañía.
El secretario general del Sindicato de Peones de Taxis de Buenos Aires, Omar Viviani, manifestó su rechazo al nuevo sistema de viajes particulares y advirtió que no dejarán que Uber se instale “bajo ningún concepto”.
“Como esto es todo tecnología, ahora han contratado algunos CEO para ver si arman el servicio. Pero con nosotros van a tener inconvenientes porque no lo vamos a permitir”, señaló el dirigente. En declaraciones radiales, Viviani anticipó que el 6 de abril próximo los taxistas realizarán una asamblea en el gremio, en la que se declararán en “estado de alerta y movilización”.
Según comentó, “las empresas de radiotaxi tienen aplicaciones que han hecho ellos mismos. Es decir que si usted quiere, con una aplicación solicitar un auto en cualquier esquina de la Ciudad de Buenos Aires, usted lo puede hacer. Acá lo que quieren es desregular todo el sistema”.
Viviani aseguró, asimismo, que “el Gobierno nacional está en contra de esto que propone Uber. De hecho, hay una ley en la Ciudad de Buenos Aires que prohíbe la instalación de cualquier sistema que no sea por radiotaxi”. Uber comenzó a funcionar en Estados Unidos en 2009, y rápidamente se expandió por varios países del mundo, muchos de ellos de Latinoamérica.
Buenos Aires, NA.