Desde su lugar como titular de la Delegación Municipal y siguiendo de cerca todo lo relacionado a la obra de Dasso, Rubén Caldez describió la satisfacción personal que genera este avance importante para la localidad.
“Es un día muy particular y que toda la gente de White estaba esperando. Y finalmente llegó. Ahora el vecino va a poder ver todos los avances en el día a día. La satisfacción es muy grande y había una deuda con la localidad. Héctor (Gay) quería hacer Dasso y yo las compuertas. La satisfacción es doble”, destacó Caldez.
Por su parte, Alejandro Meneses, desde la Secretaría de Infraestructura del municipio, hizo referencia a algunos detalles particulares de la obra.
“Esto le va a cambiar la cara a White desde su ingreso. Estas trochas quedaron angostas y cumplieron su ciclo de vida útil. El cambio va a ser fundamental. Van a ser cuatro trochas de hormigón, con calles laterales, parquizado, veredas e iluminación. Partimos desde Brihuega y Dasso con tareas de nivelación y la idea es ir sin pausa hasta la ruta. El plazo es de 12 meses y el año que viene esperamos transitarla”, señaló Meneses.
Por su parte, la ex-delegada y concejal Marisa Pignatelli dio sus puntos de vista sobre este día importante.
“En esta época que estamos viviendo, no deja de ser una satisfacción. Dasso es una obra largamente planificada y pedida, y verlo hecho realidad es una satisfacción. El Ingeniero White de hoy no es el que conocimos, tiene otro flujo de tránsito y su desarrollo es importante. Por eso, es imprescindible que Dasso tenga esta magnitud”, apuntó Pignatelli, quien también hizo referencia al proyecto de revitalizar el sector de cantinas cuando las circunstancias de la pandemia lo permitan.