Cebreiro vivió en Bahía Blanca hasta los 10 años y luego se mudó a Coronel Dorrego junto con su familia. Una vez que culminó sus estudios secundarios, regresó a esta ciudad para estudiar en la Universidad Nacional del Sur.
Una vez graduado, trabajó en D.E.B.A, en E.S.E.B.A. S.A, en la localidad de Necochea y en Distrocuyo, en Mendoza, hasta que los franceses vieron su potencial y se lo llevaron a vivir a París.
Hace cinco años, Pampa Energía, la empresa a cargo de la construcción de los molinos eólicos decidió repatriarlo.
Cebreiro ocupaba un cargo jerárquico en una de las empresas del grupo. Su oficina estaba en el mismo piso de los dueños de la compañía, y si bien no tenía vinculación directa con la obra, pero sí era un hombre de consulta permanente.
“Estamos muy emocionados. Fue un hermoso reconocimiento a alguien que además de ser un gran profesional fue una excelente persona. Que miembros de la compañía, el intendente y el mismo presidente lo destaquen, fue maravilloso”, destacó Pablo Cebreiro, el hermano del ingeniero reconocido.
Fuente: Gentiliza La Brújula24