El proyecto, de gran importancia para el futuro a corto, mediano y para nuestra ciudad, atraviesa su etapa de diagnóstico, luego de la cual se espera una elaboración de la “Visión 2040”, para finalmente dar lugar al desarrollo concreto del estratégico a seguir.
“La visión que le otorgamos a esto es regional, dándoles no solo a los actores de Bahía, sino también a los de Puerto Rosales y la Base Naval Puerto Belgrano. Cabe destacar también la amplitud de la convocatoria, ya que además de habernos reunido –entre otros– con el intendente, concejales, numerosas portuarias, funcionarios municipales, sociedad de fomento y entidades recreativas, se convocó también a diferentes ONG´S ambientalistas, dado que queremos un crecimiento sustentable y en armonía entre todos los sectores”, explicó Pablo Pussetto, presidente del Consorcio de Gestión.
“El proceso de planeamiento estratégico comenzó en febrero y terminará en septiembre. Ahora involucramos a todos los actores para ver dónde estamos parados, en junio comenzaremos a elaborar una visión hacia el 2040 y hacia septiembre se espera determinar qué acciones concretas tenemos que hacer para pasar de la situación actual al futuro. Las mayores precisiones lógicamente las tendremos respecto de los cambios que se producirán en el corto y mediano plazo, es decir dentro de 5 o 10 años”, agregó el ingeniero.
Sobre el potencial del puerto local y los ejes sobre los que se deberá planear el futuro no tan lejano, Pussetto subrayó la incidencia que dos proyectos en concreto podrían tener sobre Bahía y la región.
“Algo que no se discute son las innegables posibilidades de crecimiento para el puerto en los próximos años, muchas iniciativas tienen la posibilidad de confluir aquí. Obviamente, una gran parte asociada a las cargas tradicionales de granos, cuya perspectiva a nivel nacional es de aumento; mientras que otras de distinto tipo de cargas, como el desarrollo de Vaca Muerta o la posible ampliación de la planta de Dow, generarían un gran cambio no solo para la ciudad, sino para la región.
Vaca Muerta tendría un impacto directo sobre la operación local y para eso tendríamos que preparar no solo el puerto, sino la infraestructura de vinculación ferroviaria y vial con la provincia de Neuquén para convertirnos en su puerto de entrada y de salida”, reflexionó el titular del CGP.
Finalmente, Pussetto contó que gran parte de las 60 reuniones que se llevaron a cabo los últimos 5 días contaron con la presencia de consultores del puerto holandés de Rotterdam.
“Vinieron 6 profesionales, algunos de ellos holandeses, y otros argentinos vinculados con la consultora. Al tener la experiencia de haber trabajado durante muchísimos años con el puerto más importante de Europa, lo que hacen es guiarnos en la construcción de una visión más sólida, porque saben qué prácticas, iniciativas y mecanismos de planificación se utilizan en otros puertos del mundo y pueden ser el valor agregado que necesita Bahía Blanca”, concluyó el ingeniero. (LA NUEVA PROVINCIA)