A casi un año de ganar el concurso de ideas y luego de presentar el anteproyecto, los arquitectos Enrique García Espil y Sebastián Cerri volvieron al puerto para formar parte de la presentación del libro del Muelle de Elevadores.
“La experiencia es increíble y desde que ganamos el premio empezamos a trabajar en el proyecto y la documentación. Para los arquitectos son aspectos centrales, pero para los habitantes no hay nada como ver la obra construida”, sostuvo García Espil.
“No recuerdo ver un lugar con estas cualidad, la suma del puerto y la comunidad, y una vinculación tan particular. Además de la presencia de elementos, como los elevadores y los barcos”, detalló.
“Es un hito importante a nivel profesional. Generar y transformar la realidad, trabajando con la memoria del lugar, de algún modo activa el pasado en este presente. El lugar tiene una fuerza impresionante”, destacó Cerri.
“Y el libro es la piedra fundacional que permite sostener esta iniciativa en el tiempo y le da fuerza al proyecto”, cerró.