En un escueto pero categórico comunicado el CENPAT, un prestigioso organismo de investigación científica de la Patagonia, dejó en ridículo al gobierno de Chubut que conduce Martín Buzzi. La Provincia había informado oficialmente el viernes que como producto de la escora del buque Cabo San Sebastián, varado en la playa de Puerto Madryn, “el CENPAT certificó que no se detectaron concentraciones significativas de hidrocarburos en las muestras de agua”. La afirmación la realizó el ministro de Ambiente, José María Musmeci, en un afanoso intento por relativizar el impacto ecológico y el daño sobre el Golfo Nuevo producido por un barco que estaba bajo custodia del Estado Provincial.
El organismo académico y de investigación refutó con premura las apreciaciones del funcionario de Buzzi, advirtiendo que en ningún momento se expidieron sobre niveles de contaminación, y un segundo lote de muestras no han sido aún sometidas a análisis para emitir juicios valorativos.
Al tomar estado público la bochornosa situación, el Gobernador habría reprochado a Musmeci su falta de cintura política para atender la problemática, y habría ordenado que se proceda al vaciamiento de todos los tanques de combustible de los barcos de Alpesca que permanecen tirados, literalmente, en la costa de Madryn. Y, es que el viernes, el Juzgado Federal de Rawson dictó una medida cautelar donde intimó al gobierno de Martín Buzzi a que en forma inmediata procesa al ‘achique’ las sentinas e hidrocarburos que hubiera en cada uno de los pesqueros bajo custodia del Estado, ante el riesgo inminente de otro derramamiento.
La justicia puso en cabeza del ministro José Musmeci y el interventor de Alpesca, Omar Albornoz la responsabilidad de la orden imperativa de vaciar los tanques de los buques en cuestión, y ambos funcionarios serían citados a declarar en los próximos días. Durante todo el fin de semana y hasta ayer a última hora se observó equipos del Ministerio de Ambiente procediendo al retiro con bombas y tuberías del gasoil que contenían los barcos.
En tanto, se prevé una rápida reacción de la Cámara de Diputados que citaría a Musmeci a una interpelación para que informe sobre el episodio en el que fue desmentido por un prestigioso grupo de científicos, lo que abre severas dudas sobre la dimensión del daño ecológico acaecido en las costas madrynenses.
Las declaraciones que desataron la polémica fue cuando el ministro indicó que “las muestras dieron una baja concentración de hidrocarburo; inclusive la más alta que se da cerca de la barrera de contención no supera los niveles normales de concentración que tienen aguas próximas a un centro operativo portuario”, minimizaba Musmeci el viernes.
El sábado, el CENPAT emitió un comunicado que expresaba que el centro “desea clarificar a la comunidad los siguientes puntos: hemos realizado análisis de concentración de hidrocarburos totales, a pedido del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de Chubut (MAyDS), una vez que las muestras de agua ingresaron por la mesa de entradas aportadas por técnicos del Ministerio en cuestión”.
“El CENPAT-CONICET ha provisto los valores resultantes el viernes al MAyDS, no expidiéndose en documento alguno sobre niveles y tipos de contaminación, así como comparaciones con otros sitios portuarios que pudieran ser interpretados a partir de dichos valores”, clarificaba el Instituto dejando sin sustento las apreciaciones del funcionario del Gobierno.
“El CENPAT ha participado, a pedido del MAyDS, en la colecta de un segundo lote de muestreo destinado a tipificar y caracterizar los hidrocarburos y otras sustancias derramadas, determinaciones que están siendo realizadas mediante Cromatografía Gaseosa con Detección por Espectrometría de Masa, y cuyos resultados aún no están disponibles”, refutaron los investigadores.
Huelgan las palabras. (Por Nelson Saldivia; Revista Puerto)