Luego del cierre de temporada en el Torneo de Segunda División en el básquet local, el director técnico de Deportivo Whitense, Pablo Kooistra, visitó los estudios de La Brújula 24 y formó parte de la 766º edición de IngenieroWhite.Com.
“Me pareció un torneo en el que jugar una vez por semana fue poco. Las prácticas eran buenas, pero los jugadores no estaban cómodos. Nos perjudicó y le sirvió más a los equipos que están en otro nivel”, indicó.
–¿Cuál fue el primer balance que realizaron apenas terminados los playoffs?
–Nos tocó un cruce con Independiente complicado, con un rival armado con una mitad de cancha de Primera. Este año mejoramos en nombres a nuestro equipo y sentimos que no terminamos como queríamos. Tuvimos algunas lesiones y muchos cierres apretados que no supimos resolver. Eso hizo que terminemos unos escalones más abajo.
“De todos modos, nos preparamos con mucha ilusión para ese cruce con Independiente, un rival que nos incomoda siempre. Buscamos minimizar los errores, pero otra vez el quiebre fue en el tercer cuarto. Fuimos competitivos como en varios partidos del torneo y el camino se fue complicando”, amplió el DT.
“Lo importante, después de todo, es que Whitense termine saneado. El equipo se armó con un presupuesto cero, sumado a la inversión que se hizo por Alen Ríos. Le quiero agradecer a Whitense por permitirme desarrollar este proyecto y por trabajar siempre con comodidad”, aseguró.
–¿Seguís en el 2020?
–En noviembre nos vamos a sentar a hablar con Hugo López y a hacer el balance correspondiente. Si están las condiciones dadas para seguir, la idea es potenciar el equipo y seguir mejorando las menores. Estamos bien en cantidad de chicos y nos falta dar el salto de calidad.
En ese sentido, el próximo 9 de noviembre Whitense recibirá la visita del Club Rivadavia de Tandil en un encuentro formativo. “Es la semilla que tratamos de plantar para que el club tenga ese contacto a futuro”, cerró Kooistra.