Creemos que es una oportunidad para darle visibilidad a una enfermedad que llega sin previo aviso, para ampliar el conocimiento social acerca de la misma.
Alentarnos a tomar el ejemplo de Martin como un gran mensaje: a mirar en positivo en la medida de lo posible y porque es posible.
Hoy queremos destacar la superación, la resiliencia y sobre todo la perseverancia. El es Martín Godoy, jugador de nuestro plantel mayor. Hace unos días recibió una noticia que nos llena de alegría. Estamos orgullosos como toda familia, y este club sí que lo es, por la capacidad que tuvo y que tiene de no bajar los brazos ante una adversidad.
Martín fue diagnosticado con Esclerosis Múltiple en 2019. La EM es una enfermedad que afecta el cerebro, la médula espinal y los nervios ópticos. Estos conforman el sistema nervioso central, que es el responsable de controlar todo lo que hacemos.
Por esa razón, quienes padecen EM se pueden encontrar con dificultades en el habla, pérdida del equilibrio y la coordinación, entumecimiento de los miembros superiores e inferiores, perdiendo de manera progresiva la capacidad de desenvolverse con total autonomía.
La EM no tiene cura al día de hoy, pero su tratamiento puede reducir los síntomas, prevenir nuevas recaídas y mejorar la calidad de vida.
La clave para Martín, sin lugar a dudas, estuvo en el optimismo y la valentía con la que enfrentó y enfrenta. Ahí es donde principalmente queremos destacar a este jugador.
Un luchador, no solo dentro de la cancha, sino sobre todo fuera. Su optimismo, como mencionan quienes más lo conocen y quieren, fue la base para avanzar.
Desde el inicio su frase de cabecera fue: “esta enfermedad a mí no me va a ganar”.Esto lo llevó a trabajar incansablemente en sus hábitos, en su alimentación y rutinas, relegando muchas cosas de las que un pibe a esa edad no siempre estaría dispuesto ni con la voluntad suficiente para hacerlo.
Hoy podemos decir que la perseverancia y la meta clara de estar en esta vida para “romperla y disfrutarla” dieron sus frutos. La enfermedad para Martín, para “Godoy”, como lo conocemos muchos en el club, está apagada, sin actividad que afecte su cerebro. Es una emoción inmensa para todos. Queremos homenajearlo y abrazarlo por su voluntad y superación.