Desde el CCK, el Presidente presenta su plan de Gobierno, con reformas tributarias, laborales y financieras.
En 35 minutos de discruso, el presidente Mauricio Macri dijo que “si no hay consensos básicos sobre el rumbo y los objetivos” del país no habría “inversiones, ni productividad, ni competencia empresaria, ni equidad, salida de la pobreza y de la desigualdad”.
“Reformar es crecer, transformar es lograr resultados. Hay que generar una agenda de reformas permanente que esté en sintonía con este proceso de transformación tan grande en la historia de la humanidad”, advirtió en el arranque de su discurso.
Asimismo, consideró que “no podemos seguir debatiendo realidades como si viviéramos en otro siglo. Los cambios tecnológicos pueden ser oportunidades para resolver nuestros problemas o amenazas si negamos su existencia”.
Además, convocó a “profundizar la transformación que empezamos juntos” y señaló que “se trata de un cambio de fondo, verdadero, que se basa en la esperanza de saber que somos mejores que la vida que hemos llevado”.
“Empezamos un nuevo tiempo, no aceptamos más el no se puede que tanto daño nos hizo durante décadas”, advirtió el mandatario que cuenta con el espaldarazo que significó el gran desempeño electoral de Cambiemos en las reciente elecciones.
En el Centro Cultural Kirchner (CCK) el jefe de Estado congregó, además de su Gabinete entero, a gobernadores, diputados y senadores nacionales, miembros de la Corte Suprema de Justicia, sindicalistas, empresarios, representantes de cultos y de universidades.
En su propuesta, Macri convocó esta tarde a los gobernadores a “pensar soluciones duraderas” para lograr el “equilibrio fiscal en todos los niveles de gobierno” y “acercarnos lo más posible al superávit de las cuentas públicas”.
“No podemos seguir gastando más de lo que nos ingresa. Tenemos que comprometernos al equilibrio fiscal en todos los niveles de gobierno, acordar un camino entre la Nación y las provincias para acercarnos lo más posible al superávit de las cuentas públicas”, planteó el mandatario para luego pedirle a los gobernadores “pensar soluciones duraderas”.
Al respecto, advirtió: “Esto, insisto, no es negociable. No es nuestro dinero el que nos toca administrar, es el dinero de todos lo argentinos y debemos administrarlo con la mayor responsabilidad posible. Una parte central de la reforma será la definición de una nueva relación fiscal entre el gobierno nacional y las provincias”.
Fuente: Télam.