“Es más fácil que un consumidor entienda una promoción al decirle que va a adquirir dos productos al precio de uno que decirle que el producto tiene un descuento del 50%”, explicaron en una cadena supermercadista.
La inflación lleva a que muchas cadenas oculten los precios de los productos tras las promociones y esa necesidad de hacerlos “visibles” fue una de las razones que en su momento llevó a la Dirección de Defensa del Consumidor de la Nación a conformar la metodología de Precios Claros, que incluye los listados de precios de los supermercados próximos al domicilio del consumidor.
En tanto, Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market y asesor de la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CAME), dijo a Télam que “hubo un caída de venta de las primeras marcas en los hipermercados y eso explica las promociones de los viernes y sábados que luego se extendieron de jueves a domingo”.
“Hay paquetes de 2×1, 3×2, 4×3 de promociones de bebidas con y sin alcohol que habían bajado sensiblemente su consumo”, describió; y agregó que también hay promociones en productos farináceos, arroz, lácteos, de higiene personal y limpieza del hogar, como lavandinas y jabón en polvo.
Consultado sobre si las ofertas de mercaderías redundan en un aumento de la facturación de los canales de distribución, el analista dijo que obedecen al “alto stock de volumen del sector industrial”; y relativizó su efectividad porque el consumidor se desempeña con un criterio “racional, cauteloso”.
Describió que la modalidad de las ofertas se acentuaron en la última quincena, en un marco de caída de ventas de 9,2% en mayo, según relevamientos de CAME y una contracción de 5,5% en los primeros cinco meses del año; e indicó que -según el sistema Scanntech, que usa el sector supermercadista- las ventas en mayo bajaron 2,1% intermensual y 20,2% interanual.
En tanto, fuentes de las grandes cadenas supermercadistas dijeron a Télam que la variante de las ofertas surgió “hace tres o cuatro años” y obedece, principalmente, al tema de la inflación; “con la inflación la gente pierde el valor de referencia”.
“Si alguien ofrece una rebaja del 30% uno no sabe a qué se refiere porque desconoce el precio del producto, en cambio si le dicen te vendo dos productos al precio de uno, es más fácil comprenderlos. Es una estrategia comercial”, resumieron.
En noviembre de 2013 la cadena de origen estadounidense Walmart lanzó en la Argentina el Black Friday, que es una jornada de grandes descuentos previa a la época navideña, que fue imitada luego por el resto de las cadenas; “esas jornadas sirven para adelantar ventas de temporada en rubros como juguetería y decoración”, describieron.
Consultadas sobre si las ofertas sirven para sacarse de encima el stock no vendido, dijeron que efectivamente eso ocurre con productos que no tienen mucha rotación; “por ejemplo, por el aumento tarifario de la electricidad, muchos aparatos de aire acondicionado no se vendieron y como ocupan mucho espacio hubo que liquidarlos con ofertas. Lo mismo pasó con el rubro textil en 2015, que por falta de ventas hubo que liquidar el stock”.
Por su parte, Patricia Sosa, de la división Cuore de la consultora de consumo masivo CCR, dijo a Télam que el sistema de ofertas de fin de semana se comenzó a acentuar en 2014 y actualmente “se profundizó” y a su criterio esta modalidad es usada para “mantener las ventas”, dado que de otra manera “habría una contracción mayor del consumo”.
Con relación a qué cadenas ofrecen más ofertas y cuáles son los productos en cuestión, dijo que “las cadenas van variando semanalmente e incluyen comestibles, frescos y productos de limpieza y tocador” y comentó que en 2015 las ofertas eran más “esporádicas” y actualmente son “más continuas”.
“Antes era un vez por mes y ahora son todas las semanas”, comentó y manifestó sus dudas que esta modalidad vaya a ser discontinuada, dado que se volvió “necesaria” para los comercios.
A su turno, Fernando Aguirre, vocero de la Cámara Argentina de Supermercados (CAS), que engloba a los supermercados regionales, dijo a Télam que esos comercios también hacen ofertas de fin de semana pero “mucho menos” que las grandes cadenas.
“La gente ve a las ofertas como una modalidad extraña; son ofertas demasiado importantes, que incluyen descuentos del 15%; una encuesta que hicimos entre el público consumidor determina que es exagerado vender dos productos al precio de uno. La gente concluye que si hacen tamañas rebajas podrían vender más barato”, explicó.
“Aprovechan la ganancia obtenida para hacer más publicidad y desplazar al competidor”, describió; y consideró que muchas de esas ofertas son “engañosas”, al tiempo que expresó que “en un mercado normal no se ven ofertas tan exageradas”, y agregó que el argentino es un mercado con precios “distorsionados”.
En materia numérica, y con datos de la consultora Scentia, se indicó que un ticket de productos de promoción que ronde los $700,20 en un hipermercado servirá para comprar 19 unidades; si el ticket es de $338,30 en un supermercado, abarcará 11,5 unidades, y si es de $141,10, alcanzará para 6,5 unidades en los negocios de cercanía.
Los descuentos y promociones en las cadenas comprenden 13% de lo vendido; las marcas propias suman 11% de lo facturado y los Precios Cuidados significan 7% de lo que se comercializa.
Fuente: Télam