Luego de la sudestada que el sábado pasado generó una importante acumulación de agua en el sector de Cárrega y Guillermo Torres, Edgardo Pérez uno de los vecinos y comerciantes del lugar compartió una breve reseña sobre la experiencia del fin de semana.
“Es algo no habitual, pero normal que ocurra cuando hay una sudestada muy grande. Se juntan las dos mareas y como el agua no alcanza a desagotar en el mar vuelve para el lado del pueblo. No es común, pero ya ha pasado y no nos asusta”, sostuvo Edgardo.
“Esto empezó el sábado entre las 13 y las 14 horas y en un rato el agua bajó naturalmente. Es un fenómeno natural y nada más. En cierta medida, somos intrusos y esto nos afecta, aunque no deja de ser algo normal”, amplió.
“En calle Rubado suele ser algo más habitual y estamos acostumbrados. Es lógico tomar precauciones y se complica el tema del tránsito, pero no hubo ningún problema. Ya llevamos más de 30 años acá y uno es un NYC: nacido y criado en Ingeniero White”, concluyó Pérez.