Enarsa, la empresa estatal de energía, licitó el viernes pasado la contratación de nueve cargamentos de Gas Natural Licuado (LNG, por sus siglas en inglés) a fin de abastecer la demanda del fluido durante los meses más fríos del año. Los proveedores interesados tendrán tiempo de presentar sus ofertas hasta el martes 17 de mayo (la próxima semana). Tal como sucede desde 2012, el proceso comercial de compra está a cargo de la unidad de Trading de YPF que depende de Carlos Alfonsi, vicepresidente de Donwstream de la petrolera controlada por el Estado.
La operación prevé la adquisición de cinco barcos de LNG para la terminal de Bahía Blanca, emplazada en el muelle de la empresa MEGA. Está previsto que los cargamentos arriben entre el 26 de junio y el 3 de agosto, según el cronograma previsto en la licitación a la que tuvo acceso El Inversor Online. Por tratarse de una planta ubicada en las costas del mar abierto, puede recibir buques de mayor tamaño con hasta 3,1 millones de MMBTU (unidad de medida) de gas.
La licitación también prevé la contratación de cuatro cargas de LNG para la terminal de Escobar, con fecha de llegada entre el 11 de julio y el 22 de agosto. Por estar ubicada sobre el río Paraná, la planta puede recibir barcos más pequeños (cuya operación es más costosa) con hasta 2,2 millones de MMBTU de gas.
En lo que va del año, el Gobierno logró pagar buenos precios por el LNG importado como resultado de la crisis del petróleo, que tiró para abajo los precios de todos los derivados o productos relacionados al crudo. En las distintas licitaciones realizadas en 2016, Enarsa –que en definitiva es quien maneja los fondos para solventar las operaciones- pagó entre 4,50 y 5,40 dólares por MMBTU por el gas que llega por barco. Con el Brent cerca de los 45 dólares y el Henry Hubb (precio de referencia de EE.UU.) en torno a los US$ 2,20, se estima que esta vez el Ejecutivo pagará precios un poco más elevados.
Fuente: Inversor Online.