Nuestra industria es de capital fijo. Una vez que construyes un barco y lo pagas, éste debe navegar de inmediato y con la mayor cantidad de contenedores posibles para amortizar la inversión”, dijo a Transport & Cargo Robbert van Trooijen, presidente Ejecutivo para América latina y el Caribe de Maersk Line.
El ejecutivo señaló que en la Argentina, la exportación de productos frescos cayó un 4% durante el primer trimestre de 2015 con respecto a igual período de 2014. Sin embargo, la caída en el precio del petróleo augura un crecimiento, al menso modesto, para este año 2015.
Venezuela es una gran dificultad para la región.
“Hay problemas por factores políticos, económicos y cambiarios. No sabemos si esto va a cambiar en los próximos años”, destacó van Trooijen.
México, beneficiado por su vecindad con los Estados Unidos, y en los países de la Alianza del Pacífico, donde también están los mexicanos junto a Chile, Colombia, y Perú, también está haciendo bien los deberes.
La Costa Este de Sudamérica se encuentra más complicada en parte por la recesión económica y devaluación del real en Brasil y el comercio exterior regulado de la Argentina.
Robbert van Trooijen destacó el avance que se viene dando en la contenerización.
“Los preciso del contendores son cada vez más cercanos a los de las bodegas, Además, el contenedor te permite llegar con un buque a varios puertos mientras que la bodega solo puede ir de un puerto al otro con lo que se limita la comercialización”, resaltó.
Según la visión desde Maersk, las complicaciones operativas de los puertos también se trasladaron a los accesos, tanto náuticos como terrestres.
“En la gran mayoría de los países de la región, los gobiernos no acompañaron con inversiones en infraestructura para evitar los cuellos de botella logísticos que hoy se presentan. La congestión portuaria y retro portuaria hoy existe en el continente, y se hace más presente aún en Perú, Brasil y Argentina. Para que un país gane mercados, su conto terrestre debe ser tan competitivo como el portuario. No es posible que el costo terrestre entre Bogotá y Buenaventura sea el doble que el tramo marítimo de Buenaventura a Rotterdam. La burocracia es otro mal que aqueja a la región. Regulaciones aduaneras, de migraciones y demás organismos gubernamentales, muchas veces traban todo intento de ser eficientes”, sentenció el directivo.
Con la mira puesta en el futuro, el presidente Ejecutivo para América latina y el Caribe de Maersk Line auguró un crecimiento del orden del 4% al 5% en el movimiento de contenedores en la región.
A escala mundial, Maersk tiene un plan de inversiones de u$s 3.000 millones anuales para el período 2015 a 2019 para ser aplicados a la construcción de buques porta contenedores, La compañía también apunta a reducir en un 60% la emisiones de CO2 para 2017.
“Las oportunidades de avance en la región son altas. Sin embargo, el crecimiento latinoamericano seguirá siendo modesto hasta que las otras economías mundiales no se recuperen y no se lleve a cabo la inversión necesaria en infraestructura para mejorar eficiencia en la cadena de suministros”, destacó Van Trooijen.
Fuente: cronista.com