El primer programa del ciclo de diciembre de IngenieroWhite.Com tuvo su nota central en otro tema puntual para la comunidad, ya que el invitado fue Ignacio Caspe, quien se desempeña como Subsecretario de Acción Social en el Municipio de Bahía Blanca.
“White es uno de los lugares que más acompañamos y donde tratamos de trabajar con la gente”, mencionó el funcionario a modo de apertura.
Una de las principales novedades que Caspe adelantó tiene que ver con la recuperación del Colegio Manuel Belgrano. “La idea es ponerlo en valor y recuperarlo, con una inversión de 3 millones de pesos que ya están incluidos en el presupuesto. El Intendente tomó el compromiso y ya se avanzó en el convenio con la curia. Es un lugar con mucha historia para la gente de White y ocupa un lugar importante en el corazón de muchos vecinos”, destacó Caspe.
–Una vez que se reacondiciones, ¿qué piensan hacer con el edificio?
–Una de las 3 salas seria destinada para la Orquesta Escuela y distintos fines culturales, sin la necesidad de tener que ir hasta otro punto de la ciudad. También está la idea de llevar adelante un centro para gente mayor en otra de las salas.
–¿Cómo es el vínculo con las instituciones de la localidad?
–El acompañamiento es diario. Por ejemplo con los clubes, como Whitense, que pudo terminar su salón y facilitar el desarrollo de distintas actividades. La clave es trabajar en conjunto y, en el caso de White, aprovechar esa combinación público-privada que posibilita la cantidad de empresas que están ubicadas en el sector.
“Y desde el punto de vista individual, intentamos solucionar emergencias y problemas de la gente como el caso de las casas con rajaduras y el traslado a otras viviendas. Para eso, es necesario generar confianza con los vecinos y atender los problemas que tienen a diario”, indicó el funcionario.
–¿Qué rasgo distingue a la gente de White de la de otros barrios de la ciudad?
–Veo que las instituciones intermedias tienen un nivel de gestión que no se encuentra en otro lado.
La gente de White tiene proyectos, empuje y sentido de pertenencia. Yo me crié en Villa Rosas, pero desde chico iba a la pileta de Comercial y siempre me pareció una barriada increíble. Más allá de que somos un gobierno de toda la ciudad, le tengo un cariño especial a la localidad.
“Si bien tenemos oficinas de atención y servicios de emergencias, sin el trabajo territorial de las instituciones sería imposible abarcar todo. Los referentes de cada barrio son los que mejor conocen su lugar y en White eso se nota mucho”, agregó.
–¿Cómo es la relación con el delegado Marcelo Acosta?
–Desde mi función, voy a White cada 15 días, salvo que surjan problemas puntuales. La relación es buena, aunque ellos están abocados más a lo que es infraestructura y lo nuestro es más territorial. Marisa Pignatelli es otra persona que arrastra muchas ideas de White, como así también las familias Alonso, Distéfano, Andreanelli. Todos sus puntos de vista sirven.
–¿Qué experiencias te ha permitido vivir este cargo durante este año?
–Hay que tener ganas y te lleva muchas horas porque emergencias hay siempre. Me ha tocado pasar por cosas difíciles, como autorizar el sepelio de un chico, o incendios que arrasan con una casa por completo. Es imposible sacarte esas cosas de la cabeza, pero al otro día hay que arrancar otra vez porque los desafíos no terminan.
“Ocultar los problemas es una tontería. Si tomamos la decisión de hacer esto es porque creemos que lo podemos mejorar. Los resultados quizás no los disfrutemos nosotros, pero sabemos que estamos preparando a la gente para llegar a ese momento como se debe”, concluyó Caspe.
OTROS TEMAS
Planes sociales. “Atendemos a 5.800 familias de toda la ciudad, que reciben un cheque para pagar un alquiler o mejoras habitacionales, según su situación. Son planes que apuntan a la reinserción de la persona, con una instancia de entrenamiento para que no dejen de estar actividad y les sea más sencillo encontrar un trabajo”.
Presupuesto participativo. “Ninguna idea puede ser mejor que la de la gente que vive ahí. Gobernantes y promesas pasaron miles, pero los únicos que pueden disfrutar el crecimiento del barrio son los vecinos. Quizás ganen uno o dos la votación, pero queda otro cúmulo de ideas proyectadas para que puedan llevarse a cabo”.