Luego de su regreso al ámbito artístico, en el marco de las Jornadas Gardelianas, la cantante whitense Rosana Soler palpitó su presentación en la Casa del Espía, que tendrá lugar el domingo 27 de agosto, junto al guitarrista Nicolás Fernández.
“Me llena el alma hablar de White y, como artista, es algo muy lindo sentir eso. Este fue un año particular, con poca actividad. Hace poco fui convocada para las Jornadas Gardelianas, una usina de la cultura y el tango en la ciudad. Y a fin de mes, el 27 de agosto, voy a estar con Nicolás Fernández en la Casa del Espía”, indicó.
“Nos conocimos hace unos 15 años. Yo empecé a tocar tango y estaba en la biblioteca de mi barrio en Bella Vista. Todo este tiempo estuvimos en contacto. Toco la guitarra desde los doce años, tuve una banda de rock y luego fuimos incursionando en la música”, agregó Nicolás.
“Tratamos de renovar el repertorio, aunque el público está acostumbrado a ciertos temas que no pueden faltar. Incluso, en algún momento hicimos boleros y la gente quedó fascinada. Me gusta cantar tango, pero también todo tipo de género, como el blues”, completó Rosana.
Y cerró: “La Casa del Espía tiene una magia particular, mucha historia y es un café con una sensación distinta. El respeto, los silencios, la comunicación cercana con el público es maravillosa”.