Los relevamientos privados empiezan a mostrar lo que tanto desde las consultoras como desde el sector público se asumía que iba a pasar: que el segundo trimestre iba a ser duro en materia de actividad. En concreto, en mayo la economía cayó un 2,8 por ciento en comparación con igual mes del año pasado, de acuerdo a los números de Orlando J. Ferreres y Asociados(OJF).
La baja de 2,8% marca el quiebre de tendencia al alza con el que venía desenvolviéndose la economía en los últimos 14 meses y, a decir por estimaciones privadas, marcaría el inicio de la recesión, entendida esta por cuando se dan dos trimestres seguidos de contracción de la actividad.
La disminución en la actividad respondió en mayo, principalmente, a la mala cosecha de soja que se dio como resultado de la sequía que afectó a la cosecha. “Después de 14 meses de alza, se registró en mayo una contracción en el nivel de actividad económica de 2,8%, baja provocada en principal medida por los pobres rindes de la cosecha gruesa del agro”, detallaron desde OJF.
A este factor, Gabriel Caamaño Gómez agregó que además influye que el hecho de que aún la economía está con salarios viejos y precios nuevos y que “la volatilidad empieza más fuerte a partir de junio”. Calculó que en mayo se estancó la actividad (les dio 0% de variación interanual, en el dato preliminar de Consultora Ledesma), lo que arroja un acumulado de 2,4% en comparación con igual período de 2017.
Caída, desaceleración y arrastre nulo
“Es el peor desempeño desde el segundo trimestre de 2016 en esos términos de comparación. Hay caídas en agro, industria y comercio mayorista y minorista; significativas desaceleraciones en construcción y transporte”, describió Caamaño Gómez. Para el año prevé una aumento del PBI de 0,8%, “esperando un buen último trimestre (por trigo y si Brasil no se complica) aún así habría arrastre nulo para 2019”.
Desde OJF detallaron que “los sectores que hasta el mes pasado ayudaban a equilibrar con su crecimiento la baja del agro evidenciaron este mes una brusca desaceleración, llevando el índice general al terreno negativo”. “Este fue el caso de la construcción, la cual mostró un avance de apenas 2,1%, luego de promediar un crecimiento superior al 10% para los primeros cuatro meses del año. Esta dinámica se reprodujo en el sector del comercio y de las industrias manufactureras, que anotaron las primeras cifras negativas en lo transcurrido de 2018”, apuntaron.
Sector por sector
De acuerdo con al indicador de OJF, los sectores se desenvolvieron de la siguiente forma:
Agricultura y Ganadería: El sector agropecuario continúa mostrando los efectos negativos de la sequía que ya se observaron en abril. La actividad económica en este sector se redujo 26,4%, y acumuló para los primeros cinco meses del año una merma de 16,4% respecto a igual período del año pasado. En detalle, la agricultura tuvo un registro negativo en 31,5%, mientras que la actividad ganadera mostró una expansión de 4%, siempre en la comparación interanual.
Electricidad, Gas y Agua: Registró para mayo una caída de 1,5% al comparar con la actividad del mismo mes del año pasado, acumulando en el transcurso del año un crecimiento de 1,2%. La generación eléctrica mensual totalizó los 10.997 GWh, manteniéndose prácticamente sin cambios en la comparación anual, mientras que la demanda eléctrica fue de 10.618 GWh, siendo 1,6% menor al número del mismo mes del año pasado.
Minas y Canteras: Fue uno de los pocos sectores de la economía que tuvo un resultado positivo, y anotó para mayo una expansión de 5,2%, y acumulando un avance de 4,7% en lo transcurrido de 2018. En detalle, la producción de petróleo crudo creció 4,7% interanual, mientras que la extracción de gas natural subió 5,8%.
Industria Manufacturera: Registró para el mes de mayo una baja de 3,3% anual, y llevó el acumulado de los primeros cinco meses del año a una suba de 0,9%. La caída estuvo empujada por el sector de alimentos y bebidas, el cual mostró una merma de 8,8%, mientras que el sector automotriz mostró una desaceleración, cuando pasó de subas de 25% en marzo y 21% en abril a un avance de apenas 3,5% para el mes de mayo, siempre en la comparación anual.
Fuente: Cronista.