Con un mercado prácticamente paralizado, el sector inmobiliario busca alternativas para acercar inversores y reactivarse. Las criptomonedas son, para muchos, el futuro y el salvavidas de los negocios de real estate. Desde la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), buscan capacitar a sus socios y ya hay jugadores que incentivan las operaciones con monedas virtuales.
“Nosotros publicamos en 2013 un departamento en Bitcoin a través de MercadoLibre. En ese momento, lo hicimos con un valor de 100 Bitcoin para un dos ambientes“, cuenta Juan Manuel Tapiola,CEO de Spazios.
“Este jueves, hicimos una transacción con moneda virtual. Cerramos una operación por 1,2 Bitcoin para la compra de un dos ambientes”, agrega Tapiola. Remarca el salto de valor relativo que tuvo la criptomoneda en ocho años.
Para el especialista, todavía hay mucho camino por recorrer para que las criptomonedas se afiancen en el mercado inmobiliario. No obstante, incluso en pandemia, parecen ganar terreno. “Hay muchos constructores que, todavía, no aceptan esta forma de pago. Pero se está avanzando a paso firme”,asegura.
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Una de las principales razones por las que aún no se instala esta herramienta es por la desinformación. “Las criptomonedas son el futuro. Sabemos que el mundo va hacia allá. Por eso, estamos capacitando a los inmobiliarios, para que puedan ofrecer esta forma de pago. Y, así, generar mayor inversiones y quitar dudas”, afirma Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA).
“El Bitcoin es dinero y la demanda irá en crecimiento, según la cantidad de personas que ahorren en criptomonedas y cuántas de ellas estén dispuestos a gastarlas. Lo cierto es que el inmueble es un cable a tierra en un mundo virtual”, destacó Tapiola.
No sólo las desarrolladoras y constructoras empiezan a comercializar a través de las monedas virtuales. En las inmobiliarias, también se incentiva su uso para dinamizar el sector.
“Se trata de una nueva tecnología, que está en plena ebullición y que, en un futuro no muy lejano, puede empezar a ser facilitadora de negocio inmobiliarios por las ventajas que presenta su forma de pago”, señala Gabriel Brodsky, CEO de Predial.
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La transferencia del dinero se hace de manera inmediata, al igual que la acreditación en la cuenta destino. “No hay límites geográficos para hacer la transacción y los costos son muchísimos menores que si uno tuviera que hacerlo por el sistema tradicional”, detalla Brodsky.
Si bien todavía son muy escasas las operaciones de este tipo, sus clientes ya empezaron a mostrar interés por la fama que adquirieron las criptomonedas y crecieron las consultas.
De acuerdo a las proyecciones realizadas por Brandon Mintz, uno de los impulsores del Bitcoin, su valor llegará a los u$s 100.000 antes de fin de año, un poco más del doble de lo que cotiza actualmente.
“Hay mucha gente que viene teniendo una capitalización fantástica en el último tiempo, a pesar de la alta volatilidad de esta moneda“, indica Brodsky. “Esto hace que la persona que, hasta hace dos meses, no tenía capacidad de compra, ahora, pueda adquirir un departamento con las ganancias obtenidas”, ejemplifica.
A la hora de pagar en Bitcoin, el destinatario puede optar en conservar esa moneda en su cuenta o convertirla en pesos o dólares en el momento. O, inclusive, dejarlas en su billetera virtual. “Acá, no hay dos puntas, como en el dólar. No existe una cotización para el comprador y otra para el vendedor. Se establece un único valor que está disponible en Internet”, precisa Brodsky.
Para Tapiola, el blanqueo es ideal para la comunidad Bitcoin “que se encuentra desde hace tiempo en este negocio y tiene la necesidad de poder declarar montos grandes”.
“El costo es bajo (menos de 5%) y pueden aprovechar para transformar parte de sus activos digitales en inmuebles, que, siempre, es una tranquilidad. O, si no, simplemente, pueden comprar los inmuebles, venderlos luego y volver al mercado de las criptomonedas pero, ahora, con sus activos en blanco”.
Fuente: Apertura.