En 2008, el nivel de TEU operados en el país alcanzó los 2 millones. El puerto de Buenos Aires y Dock Sud concentraron el 88,4% del total.
En 2018, el total de TEU movidos ascendió a 1,91 millón (5% menos que en 2008) y la participación del complejo Puerto de Buenos Aires-Dock Sud pasó al 80,4%.
En esos 10 años, el Puerto Buenos Aires perdió 6,2 % de su participación de mercado, en tanto que Dock Sud creció un 3,3% y los puertos de la hidrovía (Zárate y Rosario) y del litoral marítimo ganaron espacio.
La participación del Puerto de Buenos Aires bajó casi un 1% en promedio en 20 años (-20,4%). Por su parte, la terminal Exolgan, en Dock Sud, aumentó su participación en el mismo período del 27,6% al 31,2%.
Y mientras en la Argentina no se registró un crecimiento en los últimos 10 años en el movimiento de contenedores, todos los países de América latina (salvo Venezuela) crecieron a tasas promedio del 5,8%.
Agenda sustentable
Desde la Asociación Internacional de Profesionales en Puertos y Costas (Aippyc) se desarrolló y actualizó una “Agenda sustentable para el desarrollo portuario logístico Argentino”, una serie de recomendaciones para revertir la actual situación.
Entre sus principales conclusiones, se señala que un Estado moderno debe planificar, controlar y promover la actividad portuaria y fluviomarítima en sinergia con las operaciones e inversiones privadas, buscando la sustentabilidad logística y del transporte.
Entendemos que es deber de un Estado moderno facilitar y promover el comercio exterior, apoyando las producciones y exportaciones con mayor valor agregado y el relacionamiento con el mundo.
Acciones
Bajo estas premisas, se necesita desarrollar un sistema portuario-logístico acorde, cuya agenda debe considerar:
Liquidar la Administración General de Puertos (AGP) y Conformar el Consorcio de Gestión del Puerto de Buenos Aires.
Dejar en suspenso la licitación actual hasta que se termine un master plan consensuado, a nivel nacional, con todos los actores. Crear una Autoridad Portuaria Nacional argentina (APN) encargada de la planificación y control, respetando la autonomía de los puertos provinciales y municipales, y la seguridad jurídica de los puertos privados otorgada por la actual Ley de Puertos (no modificarla).
Crear una Administración Federal de la Hidrovía (AFH), como ente autónomo para ocuparse de la planificación y control de las hidrovías en la Argentina. De esta manera, podría también desafectarse la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, quedando en reemplazo por ambas entidades autónomas (APN y AFH).
En ningún caso se afectarían las fuentes de trabajo actuales, con intensos programas de capacitación del personal actual y sólo dejando programas de retiros voluntarios a quienes quieran retirarse.
Los cargos de estas instituciones, desde su Presidente hacia abajo, deberían tomarse por concurso público. Ambas serían autofinanciables y sustentables económicamente, sin reportarle ningún gasto al Estado nacional.
Funciones
Algunas de las funciones de estas administraciones serían:
Desarrollar un Master Plan del Sistema Macro Logístico y Portuario Argentino integral, que incluya el Área Metropolitana Buenos Aires (Lima-La Plata), la hidrovía desde Santa Fe al océano y desde Santa Fe al Norte, así como también el litoral marítimo. Los resultados deben dar lugar a un Plan de Inversiones 2020-2050 consensuado, y con justificaciones y priorización técnica, económica y socioambiental.
Estudiar el desarrollo de líneas de cabotaje nacional fluviomarítimas, con operación privada y promoción del Estado.
Impulsar y licitar corredores logísticos intermodales (ferrofluviales y ferromarítimos) de distribución transversal al eje norte-sur de la hidrovía y el litoral marítimo.
Promover y licitar la construcción naval de buques feeder y remolcadores de empuje con bandera argentina con motores a gas natural licuado (GNL) y el desarrollo de estaciones de carga a lo largo de la hidrovía y el litoral marítimo.
Oficiar de Órgano de Control de Concesiones (AFH) y de los Consorcios de Gestión Portuarios (APN), respetando siempre la autonomía de los mismos.
Una vez realizados estos cambios estructurales, tienen que quedar como políticas de Estado en el sector, y no cambiar en adelante, dándole continuidad y sustentabilidad, desde el punto de jurídico y económico.
Lo planteado son cambios estructurales, que entendemos necesarios llevar a cabo en algún momento, pues contribuirán al desarrollo sustentable del sector portuario y logístico argentino.
El autor es ingeniero civil con posgrado en Ingeniería Portuaria, magister internacional en Gestión Portuaria y presidente de Aippyc.
Fuente: Nuestromar