La experiencia es por demás innovadora, difícil de repetir a futuro si no es con alguna complicidad del almanaque y servirá a los operadores no solo para reencontrarse con un movimiento fuerte de viajeros, sino también para medir cómo es esto de enfrentar una oportunidad de una escapada de descanso de casi una semana sin depender de los clásicos períodos de vacaciones de verano e invierno.
Serán seis días consecutivos gracias a fechas no laborables, feriados y puentes –jueves y viernes Santo y lunes 1° y martes 2 de abril- que se reparten antes y después de los próximos sábado y domingo y que darán forma en el cierre de este mes al fin de semana largo en su versión más extensa de los últimos tiempos.
Con los sueldos del mes consumidos, a poco de finalizada la temporada alta y siempre en un contexto de omnipresente crisis económica, la dinámica final de esta fecha turística por ahora es un misterio. Aunque asomen los primeros indicadores alentadores en los principales destinos del centro y sudeste bonaerense.
Quizás la mejor señal sea la que llega desde Tandil, el epicentro provincial de las celebraciones litúrgicas que acompañan a esta Semana Santa. Por esas sierras, y a un par de días del feriado que abre esta serie inédita, la ocupación en elservicio de alojamiento está cubierta en un 97%.
El dato, surgido de la estadística que centraliza la Dirección de Turismo de la municipalidad de Tandil, anticipa una excelente demanda si se tiene en cuenta que para esta fecha coinciden los que llegan para quedarse de corrido con quienes, desde destinos cercanos, llegan para pasar allí el día, atraídos por un programa de actividades que incluye desde procesiones hasta espectáculos artísticos.
Playas
Por la costa la expectativa es grande y el pronóstico, a esta altura, es promisorio. Mar del Plata, que siempre corre a ritmo más lento por su amplitud de oferta, a hoy da por asegurada una ocupación de casi 70% de las plazas que ofrece la hotelería y los departamentos en alquiler por el fin de semana.
Algo mejor marchan en Cariló y Pinamar, donde hay complejos hoteleros y de apartamentos que completaron las reservas sobre todas sus unidades desde hace algunos días. Se espera que este ritmo de pedidos se acentúe en este comienzo de semana, ya con un panorama más claro y con certezas sobre las condiciones de tiempo y las posibilidades de disfrutar todavía de algo de playa y de paseos al aire libre.
Precisamente de lo que el sol y la temperatura ofrezca dependerá mucho de lo que se verá en localidades balnearias donde varios prestadores todavía tienen paradores con carpas y sombrillas en pie, listas para que la clientela disfrute las últimas horas de los servicios de esta larga temporada.
Por Cariló confirmaron a LA NACIÓN que la mayoría de las casas estarán ocupadas por sus propietarios. Es algo normal, porque las ofrecen mucho más desde las Fiestas hasta fines de febrero. Aunque reconocen los operadores inmobiliarios que la demanda de alquiler de viviendas para esta fecha supera en un 55% la ocupación que se había logrado para la Semana Santa del año pasado.
Transporte
Los medios de transporte de larga distancia también dan unas primeras señales. En tren, como de costumbre para cada fin de semana largo, conseguir pasajes es una misión imposible. O un milagro, si es que aparece alguna devolución a último momento. Se agotaron en horas, apenas salieron a la venta a principios de este mes.
En ómnibus hay mayores posibilidades, pero, sin dudas, también a un costo mucho más alto. Con valores que rondan los $41.000 a casi $52.000, hay disponibilidad en boletería. “Hay capacidad para ampliar servicios con adicionales que se incorporarán en la medida que la demanda lo requiera”, confirmaron desde la Estación Ferroautomotora de Mar del Plata.
Por vía aérea también la búsqueda ofrece plazas a la venta para los días alcanzados por este fin de semana largo. Son pocas y con valores que se acercan a los $200.000, siempre para el tramo que cubre el recorrido entre el aeropuerto metropolitano Jorge Newbery y el Ástor Piazzolla de Mar del Plata.
“Seguro vamos a estar al 100%”, anticipa a LA NACIÓN el director de Turismo de Tandil, Mariano Berenstein, ya en el tramo decisivo hacia el momento de mayor arribo de viajeros que tiene esta ciudad en todo el año. “Estamos con un promedio de 4,5 noches en las reservas tomadas”, señala para destacar que la permanencia excederá la habitual escala de tres pernoctes consecutivos que era una constante de la Semana Santa simple y tradicional.
Se espera a los turistas con una programación de seis jornadas que tendrá de jueves a domingo una fuerte impronta litúrgica, con actividades a cielo abierto y de acceso libre, y hasta el martes con ferias de artesanías y gastronomía, museos y circuitos turísticos desde el casco urbano hasta la altura de las sierras.
Oportunidad
En los distintos destinos bonaerenses reconocen que este enlace de feriados es una muy buena oportunidad para el sector, pero también un riesgo para los destinos que dependen en buena medida de la usina de viajeros de la Capital y el Gran Buenos Aires. “Seis días es una tentación para ir a lugares más lejanos, incluso al exterior”, admiten operadores de la costa atlántica.
Mientras tanto Mar del Plata, con optimismo, vuelve a encender las marquesinas de los teatros. El rubro fue el que mejor rendimiento tuvo durante la última temporada, con ventas de tickets por sobre el muy buen verano anterior y bajo la premisa de “precios cuidados”, con valores que se mantuvieron desde diciembre a febrero. Entre varias propuestas vuelve Fátima Florez con 100% Fátima, su espectáculo que fue el más taquillero del verano, y Mauricio Dayub con dos clásicos: El amateur y El equilibrista.
Habrá, además, un torneo de surf y un recital de Alejandro Lerner. También se realizará la Noche del Turismo y la Cultura que este jueves ofrecerá transporte y acceso libre a museos; una exposición de tatuajes, otra de comidas y el 53° Abierto Internacional de Ajedrez, entre varias propuestas más.
Villa Gesell propone sus Pascuas en el bosque, con actividades para toda la familia, pero muy en especial para los más chicos en el sector de Pinar Norte, con juegos y entretenimientos. Habrá un festival de Chamamé Rock en Mar Azul, encuentros corales y el viernes, un Vía Crucis viviente. Pinamar tendrá buen golf con su Copa Pino de Oro en Links Pinamar y en el partido de La Costa se prepara la 3ra Fiesta de la Pesca Artesanal Costera y un evento de paracaidismo que en Santa Teresita abre la oportunidad de vivir la experiencia de saltar en tándem desde 10.000 pies de altura.
Fuente: La Nacion