El ingreso necesario para que una familia bahiense compuesta por dos adultos y dos niños en edad escolar no sea considerada pobre se ubicó en $112.480 en mayo, 5,8% más que el mes previo, de acuerdo con los datos del Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca (CREEEBA).
Mientras, la cantidad necesaria para que una familia del mismo tipo no califique como indigente subió 5,1% a $50.102, impulsada principalmente por el alza de los precios del azúcar (31,1%), el café (18,6%), hueso con carne (18,2%), la cebolla (15,5%), otros productos como el pan francés, los fideos secos y la harina de trigo (con un incremento promedio de 14,3%).
De acuerdo con las definiciones técnicas, una familia que no llegue al monto de la Canasta Básica Total se considera pobre (esta canasta incluye alimentos, servicios, indumentaria y otros gastos) y si no le alcanza para cubrir la Canasta Básica Alimentaria, clasifica como indigente (esta canasta está compuesta solo de alimentos).
Por el lado de los bienes no alimentarios la variación respondió principalmente a aumentos en calzado para hombre (18,3%), combustible y lubricantes (15,8%), artefactos a gas (13%), ropa exterior para mujer y para hombre (incremento promedio del 11,6%), jabones de limpieza (12,3%), artículos de tocador (9,9%) y medicamentos (9,8%).
En el último año, la CBT en Bahía Blanca se ha incrementado 64,7%, mientras la CBA lo ha hecho 68%. (LB24).