La nueva medida de fuerza del Frente de Unidad Docente comenzó hoy y concluirá mañana, a la espera de una mejora salarial.
En la Casa de Gobierno, en tanto se define si se adopta una resolución para extender el calendario escolar en diciembre en las escuelas o los cursos que hayan perdido los 20 días de clases que se cumplen hoy fuera del aula.
El año pasado el gobierno adoptó una resolución similar pero finalmente la dejó sin efecto luego de la firma de un acuerdo en paritarias en julio de 2017.
Este año el conflicto se profundizó. Y nada indica que la puja se pueda resolver en el corto plazo:
mientras el gobierno ofrece una mejora en torno al 20, 7 por ciento los sindicatos que hasta ahora exigian el 30 por ciento hasta fin de año ahora actualizan su reclamo al 40 por ciento, acorde a las proyeccciones de la inflación.
Dentro de la Casa de Gobierno se evalúa la manera de que 1.7 millones de niños que asisten a 12.000 escuelas públicas y 6.000 establecimientos privados puedan cumplir con el calendario escolar pese a las reiteradas medidas de fuerza en este territorio.
Una alternativa es extender el calendario entre el 18 y el 23 de diciembre. Pero de ese modo sólo se habrían recuperado 5 días de los 20 que ya se perdieron.
En tanto en las escuelas que hicieron paro se suspenderán las jornadas de capacitación docente para no perder más horas de los niños dentro de las aulas.
Mientras en el seno del gobierno toma forma esta decisión, en el Senado de la provincia se analiza la declaración de emergencia edilicia que ya votó la Cámara de Diputados el jueves último.
Cambiemos tiene mayoría en el Senado y podría frenar la declaración. Pero en Diputados el bloque oficial acompañó la iniciativa de la oposición bajo el convencimiento de que es una manera de reconocer la desidia de 29 años de gobierno mayormente peronista en este territorio. “En sólo dos años no se puede revertir el estado en que se encontraron los miles de edificios”, dijo una voz oficial de Cambiemos.
Fuente: La Nacion