Este domingo el Museo del Puerto cumplió 34 años, el mismo día del aniversario de la localidad, así que el festejo fue doble. O múltiple, porque un cumpleaños del museo se hace entre muchas personas: presentaron sus especialidades las cocineras Flora Rossi y Mónica Villagrán, trajeron también platos dulces las familias de la cooperadora del Jardín 932, del barrio Boulevard. La torta de cumpleaños estuvo a cargo de las Amigas del Museo, que además armaron mesas con café, chocolate y publicaciones de la Editorial Cocina del Museo.
No faltaron los regalos, que fueron musicales: para esta fecha especial un grupo de vecinas y vecinos cantorxs presentó un repertorio de cumbias, tangos y boleros.
A continuación, entonó sus tangos preferidos el vecino Antonio “Pochy” Genovali, sonando también en su voz parte de la historia tanguera de este puerto.
Como cierre, tocó la banda de cumbia-rock “La 500”, que lleva su nombre por la línea de colectivos que trae y lleva gente desde Ing. White hace años.
A lo largo de la tarde llegaron personas con reposeras, manteles, recuerdos del museo, mates, generaciones nuevas. El patio convertido en una gran cocina, con baile, encuentros, instituciones, música y mucho mucho trabajo colectivo. Con la sensación de que un poco este lugar se construye en el presente, en el momento de acercarse a compartir el festejo, pero a la vez ya era parte del corazón de cada uno, que cuando llega se queda en esta esquina.