El Gobierno analiza por estas horas las nuevas medidas restrictivas que comenzarán a regir en el país desde el próximo viernes, poniendo el foco en “reforzar los controles” por parte de los intendentes y gobernadores, y aplicarnuevas restricciones en actividades recreativas, ante la segunda
ola de coronavirus en la Argentina.
Así lo indicaron fuentes oficiales, que detallaron que el nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) tendría una duración de 15 días con “pequeñas modificaciones”, sobre todo en lo que implica actividades recreativas. “Las medidas serían las mismas que hasta el momento, con algunas pequeñas modificaciones, y se extenderían por 15 días”, resaltaron.
En esa línea, subrayaron que “se va a pedir que se apliquen fuertes controles” en las diferentes jurisdicciones, y aclararon: “Por ahora está descartada una fase 1, lo que se va a hacer esseguir con las mismas medidas pero ajustando algunas cosas”.
Entre los temas que están arriba de la mesa para ser analizados se encuentran la posibilidad de “reducir actividades al aire libre” en los distritos que se encuentran dentro de la zona de mayor riesgo epidemiológico, además de volver a llevar a la virtualidad actividades profesionales.
Dentro de las nuevas medidas, que serían anunciadas el próximo viernes por el presidente Alberto Fernández, se podría incluir “una presencialidad administrada en las escuelas”, que estaría sujeta a valores epidemiológicos que funcionarían de modo similar al semáforo de fases con el que cuenta la provincia de Buenos Aires.
Respecto a la restricción de circulación nocturna, algunas fuentes indican que “no se toca”, por lo que seguiría vigente de 20 a 06 en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), mientras que otras fuentes con despacho en Balcarce 50 afirman que “se está analizando llevar el horario de cierre a las 18.00”.
En ese marco, las fuentes consultadas indicaron que “se diluyó la idea de endurecer las medidas, ya que la recomendación de los expertos es esperar el impacto de las medidas que ya se tomaron”.
Además, consideran que el Gobierno “tiene que guardarse esa bala de plata” para “cuando llegue el invierno, ya que se puede llegar a complicar mucho más la situación sanitaria”. (NA).