Asimismo, las Direcciones Generales de Impuestos (DGI) y de Aduandas (DGA)quedarán bajo el ala del Ministerio de Economía.
A su vez, 3.155 empleados que entraron a la AFIP durante la pasada gestión “de manera irregular” serán reubicados y pasados a disponibilidad. Según aseveró el portavoz, esto generaría un ahorro presupuestario del 6.400 millones de pesos anuales.
Por otro lado, los altos rangos dejarán de percibir la “cuenta de jerarquización”, por la cual la titular del organismo recibía un sueldo de más de 30 millones de pesos y los directivos más de 17 millones por mes, y pasarán a cobrar sueldos de ministros, que rondan los cuatro millones de pesos.
“A lo largo de su existencia, este organismo funcionó como una caja política y, como todos sabemos, han sometido a muchos argentinos a persecuciones completamente inmorales“, señaló Adorni.
“Esa Argentina de la voracidad fiscal se terminó. Lo que es de cada argentino es suyo y de nadie más, ningún burócrata del Estado tiene por qué delegarse el poder de decirles que hacer con su propiedad”, agregó el vocero, quien luego citó los principios del liberalismo pronunciados por el presidente Javier Milei durante su asunción.
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Fuente: Ambito