Tomar un jugo verde, comer una tostada untada con palta, un tazón de açaí o reemplazar el aceite común por el aceite de coco, podrían ser opciones consideradas “saludables” ideales para “limpiar” el organismo y eliminar la grasa. Pero, ¿son estas modas realmente nutritivas y efectivas para estos objetivos? No siempre.
La nutricionista Amy Shapiro y Maria Bella advirtieron al periódico Daily Mail que muchas de las principales tendencias “saludables” actuales están en realidad cargadas de azúcar y calorías o, lo que es peor, componentes nocivos, lo que echa a perder el equilibrio de una dieta y puede impactar en la salud.
Las especialistas advierten entonces que es importante prestar atención a los ingredientes cuando se trata de comprar alimentos o realizar ciertas preparaciones. ¿Cuáles son los beneficios y desventajas de las ocho tendencias de salud más populares del último tiempo?
1. TAZÓN DE AÇAÍ
El açaí es el tesoro alimenticio de la Selva Amazonas. De estética similar a la de un arándano pero más grande y nutritivo, el açaí es rico en vitamina A y E, ácidos grasos omega-3, 6 y 9, aminoácidos, calcio, fósforo, contiene una buena cantidad de fibra y es bajo en azúcares.
En el último tiempo, principalmente en Estados Unidos, los “açaí bowls” se convirtieron en una de las tendencias saludables más extendidas. Se trata principalmente de un puñado de frutas (batidas o enteras) combinadas con cereales y semillas. Es una opción saludable, que produce saciedad y aporta una gran variedad de nutrientes.
Según Amy Shapiro, nutricionista, dietista y fundadora de Real Nutrition en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, estos tazones están llenos de antioxidantes, que son importantes para el cuerpo porque protegen contra los daños causados por moléculas dañinas. Maria Bella, por su parte, nutricionista y fundadora de Top Balance Nutritionen la ciudad de Nueva York dijo que los tazones de açaí son también una gran fuente de vitaminas y grasas para a la dieta.
Pero, más allá de las propiedades antioxidantes, los azúcares añadidos de frutas y otros ingredientes hacen que algunos expertos alerten sobre el consumo constante de estos alimentos. “Tienen demasiado azúcar por toda la fruta añadida y otros componentes”, dijo Shapiro. El consejo es prestar atención a los ingredientes cuando se va a consumir o preparar uno porque los niveles de azúcar pueden subir de forma abrupta. Bella dijo también que la adición de vitaminas y grasas para la salud pueden significar una fuerte ingesta también de calorías debido a ingredientes como la mantequilla de maní y las semillas agregadas. Las especialistas recomiendan preparar el propio y explorar también otras alternativas.
2. TOSTADA CON PALTA
El pan tostado untado o cubierto con pequeños pedazos de palta -o aguacate- (también conocido como “avocado toast”) es otra de las preparaciones que más hondo caló al punto de ser incluída en muchos menúes de desayuno alrededor del mundo. Tiene que ver con que, en el último tiempo, la palta se transformó en un alimento “de moda” por su versatilidad, su sabor y su importante aporte nutritivo.
Shapiro dijo que la “avocado toast” es más que nada rica en grasas saludables para el corazón. Las grasas que contiene este fruto ayudan a bajar los niveles de colesterol notablemente. Además, brindan una sensación de saciedad generalizada, beneficiosa para el desarrollo de un plan para bajar de peso. Sin embargo, es importante prestar atención al tipo de pan que está utilizando. “Los granos germinados son increíbles para el control del colesterol y del azúcar en la sangre y se ha demostrado que causan menos problemas gastrointestinales”, dijo Bella.
En caso de usar pan de trigo integral, es importante corroborar que tenga por lo menos 5 gramos de fibra por porción. Otra cuestión a tener en cuenta es que a pesar de que la palta es rica en nutrientes, es importante medir la porción. La cantidad recomendada para una rebanada de pan es un cuarto de palta. También se pueden agregar otros ingredientes como huevos, salmón ahumado o semillas de girasol para potenciar los beneficios.
3. GRANOLA
“La granola puede ser sin gluten y estar llena de ingredientes saludables como las nueces, semillas y avena”, señaló Shapiro. Este alimento se pudo posicionar como una de las mejores opciones saludable porque contiene grasas insaturadas buenas para el corazón y algunas proteínas. No obstante, Bella sólo recomienda esto a los pacientes que están tratando de ganar peso debido a la cantidad de calorías que una sola taza de granola puede tener.
Sin embargo, a pesar de que parece ser sumamente beneficiosa, tiende a ser la peor opción saludable. ¿Por qué? Principalmente porque puede haber un montón de azúcares ocultos y grasas en la granola que se compra en supermercados y dietéticas. En promedio, puede contener de 450 a 600 calorías en una porción dentro de una taza de granola, una cantidad obscena. Y eso no es todo. Si se agrega un poco de leche, es probable que se estén consumiendo más de la mitad de las calorías necesarias en una sola comida. Esta no es la mejor opción si se está buscando perder peso, pero puede ser funcional a una dieta para subir o recuperar kilos.
4. BARRAS DE CEREAL
Las barras de cereal son uno de los tantos alimentos considerados “snacks saludables” por excelencia. Especialmente cuando hay poco tiempo para preparar algo mejor. Pero, en general, las que existen en el mercado no son tan beneficiosas, lo mejor siempre es prepararlas en casa. “Recomiendo ingredientes enteros como dátiles, nueces, chispas de chocolate y mantequilla de maní”, indicó Shapiro.
En caso de comprarlas, es fundamental poder reconocer lo que dicen las etiquetas. Bella señaló que las barras con menos de 150 calorías y más de cinco gramos de fibra son las mejores para quienes buscan una opción verdaderamente nutritiva.
Pero sigue sin ser la mejor alternativa a otros alimentos. “Yo siempre prefiero comida real en vez de ingredientes empaquetados”, dijo Bella. Esto está relacionado con que los niveles de azúcar pueden ser particularmente altos en una barra de cereal con muchos agregados. “Las barras de nutrientes están procesadas y podrían descarrilar la dieta”, alertó Shapiro. En general, se recomienda que una barra de tamaño estándar no supere los 11 o 12 gramos de azúcar.
5. ACEITE DE COCO
Al ser de origen vegetal y tener un buen sabor, este producto beauty devenido en ingrediente culinario-que ahora es furor como una “grasa saludable” para incorporar a las comidas o reemplazar otros complementos similares- no es tan beneficioso.
“‘¿Debo cambiar a aceite de coco?’ es consistentemente una de las preguntas más comunes que vienen a mi consultorio. Lo que no es sorprendente, teniendo en cuenta que alcanza con entrar a internet y encontrar mucha información acerca del ‘increíble poder curativo del aceite'”, señaló Ellie Krieger, nutricionista y escritora de temas de nutrición y salud en The Washington Post. Esto sucede en principio porque existe una importante escasez de data científica sobre él.
Sin embargo, una investigación reciente publicada en Nutrition Reviews puso en evidencia el “lado B” de esta tendencia. El estudio descubrió que el aceite de coco, compuesto en un 92 por ciento de grasa saturada, eleva menos el colesterol LDL (conocido como “colesterol malo”) que la manteca, pero significativamente más que los aceites vegetales insaturados. Para personas con problemas cardíacos no sería sensato incorporarlo en lugar de otros aceites. “Sería peligroso, y más bien tonto, reemplazar el aceite de oliva extra virgen por aceite de coco”, señaló el investigador principal del estudio, Laurence Eyres, presidente del grupo de especialistas en Aceites y Grasas del New Zealand Institute of Chemistry.
6. LECHE DE ALMENDRA
Otra vez en este caso el problema es el azúcar. La leche de almendras es en general la primer alternativa para los intolerantes a la lactosa o los veganos porque tiene una excelente textura y es sabrosa. “La parte buena es que es baja en calorías”, señaló Bella. Sin embargo, es importante nuevamente poner el ojo en los azúcares añadidos.
“Lo malo es que es baja en proteínas”, aclaró la especialista. A pesar de que las almendras son una buena fuente de proteínas, la leche de almendras no lo es y también es baja en calcio en comparación con la leche normal. Es por eso que, de consumirla en reemplazo de lácteos, es importante compensar esos nutrientes.
La recomendación de los expertos es elegir qué tipo de leche se consume en función de lo que el cuerpo necesita. La leche de almendras podría ser mejor para la dieta si se busca una opción baja en calorías. Pero si se necesita incorporar calcio o proteína, puede que sea mejor otro tipo de leche.
7. JUGOS Y BATIDOS VERDES
Esta es, tal vez, una de las opciones saludables de moda más cuestionadas en el último tiempo. Por un lado los jugos añaden más frutas y verduras a la dieta en caso de que estén ausentes, pero, por otro lado, tanto Shapiro y Bella como otros múltiples expertos en nutrición están dejando de recomendar esta opción para sus pacientes.
¿Por qué? En primer lugar, “los jugos descartan una fibra invaluable y producen picos de azúcar que luego bajan abruptamente”, djio Bella. Por otro lado, el método de preparación también afecta el aporte nutricional. “La gente suele confundir los jugos y los batidos”. Si bien los jugos dejan atrás las fibras y potencian la presencia de azúcares, en los batidos hechos en licuadora también es necesario usar más fruta de que la que en realidad se comería de forma sólida. Shapiro explicó que por este motivo prefiere que sus clientes coman sus frutas y verduras en lugar de beberlas. Pero, si son consumidos de vez en cuando, se recomienda que en general sólo se utilice una fruta y el resto sean verduras. Esto ayuda a reducir notablemente la cantidad de azúcar en la bebida.
“Debido a que son un líquido, los batidos pueden provocar una sensación de saciedad más débil que la que un alimento sólido de energía similar”, dijo el doctor Richard Mattes, profesor de alimentos y nutrición en la Universidad de Purdue, Estados Unidos. Él publicó un estudio en el International Journal of Obesity donde se demostró que cuando la gente bebía la forma líquida de un alimento rico en carbohidratos, se consumían un 12 por ciento más de calorías totales.
En el caso de que se busque perder peso y aportar beneficios a los músculos, sigue siendo mejor comer las frutas y verduras en lugar de mezclarlos y triturarlos de esta forma. “Una mujer adulta promedio necesita 25 gramos de fibra y un hombre adulto 38 gramos, mientras que un promedio de los adultos sólo obtiene 12 gramos por día”, dijo Bella. Por eso, para aumentar los niveles de fibra, exprimir y licuar las frutas y verduras no es lo ideal.
8. SUPLEMENTOS DE CARBÓN
Si bien todavía no es un boom, esta alternativa saludable está ganando cada vez más popularidad. El interés en los suplementos de carbón aumentó notablemente debido a su potencial para ayudar a deshacerse de las toxinas en el cuerpo y la pérdida de peso. Pero los profesionales de la nutrición como Shapiro por ejemplo, ya indican que no recomienda este producto a sus clientes por la la falta de evidencia todavía. “Nuestro cuerpo ya se desintoxica lo suficiente por sí mismo”, concluyó.
Aunque existen estudios que demuestran que el carbón de leña puede ayudar con el blanqueamiento de los dientes y los síntomas de intoxicación alimentaria, esos beneficios están siendo altamente desestimados y están viendo la luz los efectos negativos que podrían producirse.
Así como esta tendencia, existieron también otros alimentos de moda que tuvieron una popularidad muy acotada debido a que se pudo comprobar rápidamente que no eran beneficiosos. Es importante siempre consultar un médico para no caer en trampas y estafas como sucedió recientemente en el caso de una mujer argentina de 33 años que falleció tras consumir “nuez de la India” para adelgazar. Muchas veces detrás de los nuevos “hallazgos milagrosos” puede existir un gran negocio. Un profesional es la única voz autorizada para recomendar o desestimar un suplemento o la ingesta de cierto grupo de alimentos. Es importante mantenerse informado en ese sentido.
Fuente: Infobae