Luego de sus destacadas acciones solidarias, cortando el pelo de la gente en situación de calle y promoviendo donaciones durante la pandemia, el whitense Luciano Salazar sufrió un accidente en su moto esta semana y pidió ayuda a la comunidad con la siguiente publicación:
“Hola a todos, quería comunicarles que este martes 16, a las 10.30, tuve un accidente en mi moto, en calle Undiano y Granada. El impacto lo tuve en la cadera izquierda, con un desplazamiento y rotura. Ayer pudieron atravesarme un clavo para sostener la misma hasta esperar la operación y poder reconstruirla”, comentó.
Y sigue: “A todos mis clientes quería decirles que la barbería permanecerá cerrada por un largo tiempo, los voy a extraña mucho. Teniendo en cuenta que es mi fuente de ingresos, quería pedir ayuda de todos ustedes, ya que voy a estar sin trabajo quizás por unos meses largos”.
Y cerró: “Les voy a dejar un alias para que puedan colaborar con lo más mínimo. Muchas gracias a todos por sus mensajes y sus oraciones, me acercaron un poco más a mi Jesús. Sigan orando por una pronta recuperación.
Alias: luciano.salazar89
Tiempos de pandemia
“La verdad es que la situación se está complicando. Yo vivo con mi mamá y mi abuela, y estamos todos sin trabajar. Yo no estoy pudiendo cortar el pelo y hoy vivimos de los sorrentinos y las pizzetas que ellas hacen. Esto nos golpea a todos”, aseguró Tano, quien cobró relevancia luego de cortarle el pelo de forma gratuita a la gente que está en situación de calle en distintos barrios de la ciudad.
“De todos modos, más allá de lo personal, no podemos quedarnos de brazos cruzados y tenemos que mirar al prójimo. Esta pandemia tiene que servir para pensar un poco menos en nosotros, ser menos egoístas y ayudar a aquellos que la pilotean día a día”, señaló.
–¿En qué pensaste para ayudar a la gente que más lo necesita en estos tiempos?
–Lo primero que surgió fue preparar 100 viandas de guiso, bien abudante. Como todo se multiplicó y la gente empezó a acercarme cosas, vamos por las 300 viandas. El que quiera colaborar con puré de tomate, papa, fideos, picada y todo eso, es bienvenido.
“La idea es conseguir el permiso correspondiente y terminar de recibir lo que nos falta para preparalo este sábado y repartirlo el domingo al mediodía. Hay barrios como Villa Caracol, donde fui a cortar el pelo, y sé que hay madres solas con sus hijos porque los padres son cartoneros y esta realidad complica mucho la posibilidad de tener un plato de comida en la mesa