Daer intentó poner paños fríos sobre los encendidos reclamos que se escucharon contra la cúpula de la central obrera este jueves en el acto por el primer aniversario de la “Multisectorial 21F”, que integran más de 1.500 organizaciones de todo el país y lideran los Moyano, las dos CTA, la Corriente Federal de Trabajadores (CFT) y los movimientos sociales. Sin atajos, el camionero, el docente Hugo Yasky y el bancario Sergio Palazzo criticaron la reunión entre la CGT y el FMI y exigieron medidas de acción directa ante la situación económica.
“Nosotros nos ponemos al frente de la defensa de los derechos de los trabajadores y no vamos a aceptar que se resigne un sola conquista, un solo convenio. Otros, en cambio, eligen dialogar con el FMI”, fustigó el líder Camionero.
En respuesta, Daer aclaró que la visita de Ricardo Cardarelli y otros técnicos del organismo se hizo para decirles que “esto no va más”, y advertirles sobre la “crisis social” en el país. “No vamos a sentarnos con el Fondo porque pueden ser más o menos simpáticos, sino a decirles: esto no va más”, afirmó Daer.
Pero además, calificó a los díscolos como “sectores minoritarios” con “diferentes miradas” y aseguró que la actual conducción de la CGT busca “salidas” a la crisis. “Algunos tienen una mirada testimonial, se sientan en la silla y lo plantean (hacer un paro), mientras que nosotros estamos intentando salidas que vengan acompañadas de un debate público”, agregó, en particular, sobre Hugo Moyano.
En diálogo con radio La Red, Daer dijo también que “los demás (por Yasky y Palazzo) plantean que hay que hacer algo, no sé si un paro”, pero agregó que esa medida “va a venir en algún momento”. No obstante, aclaró que “un paro no es un fin en sí mismo, porque si hacemos un paro nadie va a trabajar; y si después, al día siguiente, nadie va a debatir sobre las cuestiones que nos llevaron a ese lugar, es absurdo”.
Este jueves fue Roberto Fernández, el líder del sindicato de choferes de colectivos, el que admitió que en el seno de la CGT ya se comenzó a hablar de la quinta huelga general contra Mauricio Macri. “Un país que está paralizado es como un negocio que no vende. Nos preocupa que cada vez más la falta de trabajo donde nosotros somos testigos diariamente: cada vez se cierran más negocios y fábricas”, dijo el jefe de la UTA, y agregó con ironía: “Anoche me hablaban de hacer un paro, si ya está parado el país…”.
Fuente; Ambito