Cuando se habla de salud ósea, es común pensar en productos lácteos pero estos afectan a la salud a largo plazo por sus grasas saturadas. Una alternativa saludable son las semillas de chía, como una fuente de calcio y otros nutrientes esenciales para fortalecer los huesos.
Qué aporta la semilla de chía
Estas semillas provienen de la planta Salvia hispánica y son originarias de México y Guatemala. La chía es rica en fibra, proteínas, ácidos grasos omega-3, vitaminas y minerales que contribuyen a la salud ósea.
Incluir chía en la dieta regular puede ayudar amejorar la densidad ósea y reducir el riesgo de problemas como la osteoporosis. Además, su fácil incorporación en comidas y bebidas la convierte en una alternativa accesible para quienes prefieren opciones vegetales para cuidar su esqueleto.
Propiedades de las semillas de chía para los huesos
Las semillas de chía aportan calcio, fósforo y magnesio, elementos fundamentales para mantener huesos fuertes y resistentes:
- Calcio: Estas semillas tienen más calcio por gramo que muchos productos lácteos, lo que las convierte en una fuente vegetal destacada para quienes necesitan fortalecer su estructura ósea.
- Fósforo: Trabaja junto al calcio en la formación y conservación de los huesos, además de ser clave para la regeneración ósea.
- Magnesio: Este mineral ayuda a equilibrar el calcio en el cuerpo y es esencial para una correcta mineralización ósea y la absorción de otros nutrientes.
Fuente: Ambito