Esta mañana estamos reunidos los directores de hospitales y clínicas de Bahía Blanca junto a autoridades de región sanitaria para transmitir un mensaje claro y hacer un llamamiento a todos los vecinos.
Durante estos últimos meses de julio y agosto, informamos un moderado incremento de los casos COVID+, siempre bajo control y con una conducta colectiva acorde porque en los momentos de crisis es fundamental el trabajo colaborativo.
En el mes de julio se notificaron 448 casos, en agosto 514 y en lo que va de setiembre estamos en 1118, en poco tiempo pasamos de tener en promedio de 15 casos por día a 66, ayer se notificaron 136 casos y seguirá aumentando.
Notamos con mucha preocupación lo que veníamos anticipando: este aumento del número de casos está saturando la respuesta del sistema sanitario, la cantidad de camas disponibles es escasa, o nula, tanto en el sistema público como privado a lo que se agrega fundamentalmente el desgaste del recurso humano sanitario.
El grado de agotamiento que tienen hoy en día los trabajadores de salud, es alto y la curva de contagios es prolongada, en aumento y, estamos convencidos que empeorará.
El recurso humano es un recurso finito y la demanda es muy importante. Las UTI están alcanzando su mayor porcentaje de ocupación, las salas de clínica COVID-19 tienen el 83% de camas ocupadas, ayer fue un día record de nuevos casos positivos, la situación es límite y se agravará.
La moderación es un valor perdido en la mayor parte del discurso público. Y la moderación arranca con la aceptación de la incertidumbre, la propia falibilidad y el reconocimiento de las voces ajenas.
Esta pandemia nos ha puesto a prueba a todos. El sistema público, el sistema privado, las autoridades sanitarias de Provincia y Municipalidad, estamos aquí primero para llevar un mensaje coherente y fidedigno a la comunidad y segundo para comunicar que estamos en alerta máxima trabajando juntos desde el primer día para lograr mejores respuestas, la situación es crítica y grave sumado a un cansancio normal de la sociedad por las restricciones, que complejiza mucha más el escenario.
Un especial mensaje a los jóvenes: necesitamos que todos los días eviten realizar reuniones sociales tanto en espacios públicos como cerrados, es fundamental evitar las aglomeraciones de personas y utilizar las medidas de protección que recomendamos desde el inicio de la pandemia.
El próximo 21 de setiembre no solo es el día del estudiante sino también es el día de la sanidad, el mejor aplauso y reconocimiento a nuestra labor es ayudándonos a cuidarnos entre todos, evitando reuniones sociales y circulación innecesaria, no hay receta en el mundo que supere el cuidado, el distanciamiento y las medidas de profilaxis, tapabocas y lavado de manos.