«Las empresas del sector han iniciado el año pasado un nuevo proceso de inversión, que continuará durante 2017, destinado a eficientizar la logística general y el procesamiento de granos oleaginosos, en línea con el pronosticado aumento de la producción primaria que llegaría este año al récord de 130 millones de toneladas y que podría continuar incrementándose en las próximas campañas,» dijo Alberto Rodriguez, presidente de las mencionadas entidades.
Con lo previsto para 2016 y 2017 por el complejo oleaginoso-cerealero, el monto acumulado de las inversiones desde 1994, incluyendo las realizadas por el biodiésel (su principal insumo es el aceite de soja provisto por aquel), asciende a U$S 6.400 millones.
El destino de las inversiones en curso del sector, principal conglomerado exportador del país, es la construcción de puertos (preparados también para recibir el creciente transporte por barcazas, de menor costo), terminales de granos, plantas de acopio e instalaciones de almacenaje, ampliación de playas para camiones, y la reestructuración de algunas plantas, todo lo cual generará una importante generación de empleos.
Asimismo, el complejo agroexportador realiza aportes técnicos y normativos para el mejoramiento de los accesos a los puertos de exportación, la Hidrovía y la infraestructura relacionada con la operatoria, el creciente ordenamiento de los camiones para su ingreso a las plantas procesadoras a la vez que dispongan de mayor seguridad, la eliminación de los trámites innecesarios que encarecen el funcionamiento logístico y conspiran contra la competitividad de las exportaciones del país, y el ordenamiento tributario.
EL COMPLEJO OLEAGINOSO- CEREALERO ARGENTINO
Este complejo agroindustrial representado por CIARA-CEC, que coloca a la Argentina como uno de los principales países productores de alimentos del mundo, participó en 2016 con el 44,6 % del total de las exportaciones del país.
Considerado por el INDEC como el sector exportador más relevante, el complejo oleaginoso aportó en 2016 el 31,4 % (U$S 18,1 mil millones) del total vendido al exterior por el país, dentro del cual el complejo soja representó el 95,3 % del oleginoso. Comprende las exportaciones y pellets de soja (54,9% del complejo oleaginoso, U$S 9,9 mil millones), aceite de soja (22,6 %, U$S 4,1 mil millones) y poroto de soja (17,4 %, U$S 3,1 mil millones). Los principales destinos de las exportaciones de harina y pellets de soja fueron la la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, Unión Europea, la Unión del Magreb Árabe y Egipto, entre otros; del aceite de soja, India y Egipto; y del poroto de soja, China.
Por su lado, el complejo cerealero, el segundo en importancia de la Argentina, contribuyó con el 13,2 % (U$S 7,6 mil millones) del total exportado en 2016, tras incrementarse en un 36,9 % con respecto al año precedente. Dentro de este conjunto, el complejo maicero representó el 55,7 % (U$S 4,2 mil millones) del total (principales destinos: la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, la Unión del Magreb Árabe, Medio Oriente y Mercosur) y el complejo triguero, un 28,6 % (principales destinos, Brasil y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático).
Asimismo, el complejo oleaginoso es proveedor del insumo aceite de soja al complejo biodiésel, el que contribuyó el año pasado con el 2,1 % (U$S 1.240 millones) de las exportaciones totales, con un incremento del 145,1% con respecto a 2015. El aporte de la cadena de valor de los tres complejos mencionados (oleaginoso, cerealero y biodiésel) fue, en conjunto, del 46,7 % del total de las exportaciones de la Argentina, equivalentes a U$S 27 mil millones.
Con la contribución y el trabajo de este segmento productivo, la Argentina es líder mundial en exportaciones de aceite de soja (48,1 % del mercado global en el ciclo 2016/2017, según datos de este mes de USDA y OilWorld), harinas proteicas de soja (47,4 %) y aceite de maní (34 %); es el segundo exportador mundial de maíz (18 %) y sorgo (11,3 %); es el tercero de grano de soja (6,4 % del total) y harina de maní (15 %); es el cuarto exportador mundial de aceite de girasol (7,4 %) y harina de girasol (7,1 %); es el quinto exportador mundial de cebada (7,2 %); y el séptimo de trigo (6,1 %).
El complejo oleaginoso argentino, la mayor y más eficiente concentración industrial (“clúster”) del mundo, ha realizado inversiones directas, incluyendo las de biodiésel, por U$S 6,4 mil millones entre 1994-2017 y constituye el sector que individualmente más exporta del país. Tiene algunas de las plantas con mayor capacidad individual de molienda del mundo. La producción agroindustrial oleaginosa argentina llega a más de 100 destinos.
El complejo cerealero-oleaginoso ocupa a más de 250.000 empleados en forma directa e indirecta y es así uno de los sectores productivos que más dinamiza y aporta progreso al interior del país.
Fuente: Comercio Marítimo.