Para Stephanie Serdeiro, el 26 de abril de 2016 fue un antes y un después en su vida. Ese día, en Sisco y Avenente, la embistió un colectivo de la línea 500. La chica, por entonces de 22 años, quedó cuadripléjica. Nada fue igual desde entonces para la familia de Stephanie, quienes llevan siete años reclamando que se haga justicia.
Y este lunes llegó el día. El chofer del micro, Jonathan Pérez Naum, comenzó a ser juzgado en los tribunales locales por ese hecho que en el caso de la joven, le deparó lesiones neurológicas y motrices irreversibles.
Stephanie cursaba el segundo año de la carrera de ingeniería mecánica y desde los 6 años bailaba danzas clásicas. El debate donde se analizará la conducta que el trabajador tuvo en aquella situación está a cargo del Juzgado Correccional N° 2 y el fiscal del juicio es Christian Aguilar.
“A esta instancia se llega simplemente por deseos de Stefany, que más allá de las secuelas que presenta está muy consciente de cuál era su vida, qué es lo que perdió a raíz del accidente; qué es lo que no va a volver a recuperar”, expresó Sofía, la madre de la chica.
“Justamente el día del accidente habíamos estado charlando y estaba feliz porque decía que, entre sus metas, estaba el egresar como la mecánica más joven de la UTN. Quería ser madre, tener su hogar”, se lamentó la mujer.
“Su vida es despertarse y saber que su vida no es su vida. No es fácil continuar porque el juicio es revolver lo que hemos vivido estos siete años, pero ella necesita que esta persona que le destruyó la vida le pida perdón. Yo sé que esto es Argentina; nadie me va a devolver la hija que yo tenía”, finalizó. (LB24).