Se espera que para octubre llegue al país el “Víctor Angelescu”. El nuevo barco del Inidep está en fase final de construcción, etapa que incluye pruebas de mar y el ajuste de su moderno equipamiento.
Los trabajos se realizan en el astillero español Armón Vigo, ganador de la licitación internacional. Esas gradas recibieron días atrás la visita del secretario general de la Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca, Jorge Frías.
“Es un barco que nunca vi en la Argentina. No digo que acá no se pueda hacer, pero en el país no lo ví. Es una embarcación con mucha tecnología que permitirá modernizar la investigación pesquera”, le relató el dirigente a Pescare.com.ar.
Características técnicas
El buque, vale recordarlo, mide 52,8 metros de eslora y 12 de manga. Comenzó a construirse el 16 de marzo del año pasado y se destaca por una amplia plataforma de trabajo en popa junto a sus múltiples laboratorios de a bordo.
El proyecto demanda una inversión de 28 millones de dólares. Los fondos surgieron de un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). La idea de las autoridades es que entre en acción hacia fin de año, en coincidencia con la celebración por los 40 años del instituto.
“En la recorrida que realicé junto al ingeniero responsable, Jaime Amado, me llamó la atención el software que permite controlar en pantalla todo tipo de datos, de los mínimos hasta los más importantes, sobre los motores y todo el funcionamiento”, agregó Frías.
Puente de mando
Por otra parte, destacó que el puente cuenta con una visión de 360 grados, comandos de última generación y un espacio para que el capitán pueda compartir la navegación e interactuar con los biólogos.
“También hay un cuidado especial hacia la comodidad de la tripulación, una cocina que es excepcional y una sala de estar para los momentos de ocio. Asimismo, en la parte de cubierta hay herramientas y maquinarias con mucha hidráulica”, describió.
Además, Frías recordó que la empresa constructora había recibido la visita de técnicos argentinos que sugirieron reformas, como la división del pozo para separar cargas. “El astillero valora ese know-how para después aplicarlo a otras construcciones; tiene una matriz que es flexible”, dijo.
Agradecimiento y proyección
Por último, agradeció tanto al ingeniero Amado como al director del Inidep, Otto Wöhler, por haberles facilitado el ingreso al buque en representación del gremio y por todos los detalles que le ofrecieron.
“No se puede seguir pensando en extraer un recurso sin ver lo que le pasa al que está al lado. El manejo ecosistémico se impone y el “Angelescu” ayudará a trabajar con herramientas modernas en pos de ese objetivo”, concluyó.
Fuente: Pescare.com.ar