Un solitario delincuente asaltó en horas de la tarde del lunes un vivero –y forraje– ubicado sobre calle Nicolás Levalle al 1800, del barrio Villa Delfina. Para ello, encima, agredió a la propietaria.
Pasadas las 18, el malviviente ingresó al local y se hizo pasar por un cliente. Eligió unas plantas y le dijo a la mujer que lo atendía que eran para su madre. Hasta ese momento, nada hacía pensar que algo malo podía pasar.
Pero todo cambió en un abrir y cerrar de ojos. La trabajadora estaba yendo al mostrador para hacerle la factura y el ladrón la empujó por detrás. La hizo caer, la tomó del cabello, la arrastró y le robó el dinero de la caja.
La damnificada, luego, radicaría la denuncia en sede policial con la esperanza de que el “amigo de lo ajeno” termine tras las rejas. Por el momento, el agresor se encuentra prófugo.
“Me dijo que me iba a quemar”
En diálogo con LA BRÚJULA 24, Adriana, la víctima, contó que “el chico estaba sentado en los yuyos que hay en la esquina, terminé de regar y entré. Entonces cuando me vio que estaba sola, vino y me pidió tres plantas para la madre”.
“Quería que sea las envolviera y fui para la caja, con las manos ocupadas por las plantas. Ahí me pegó una patada, me ahorcó, me tiró al suelo, me agarró el cuello fuerte y el pelo. Me pedía que le diera toda la plata”, recordó con indignación.
Y agregó: “Tenía 20 mil pesos para pagar el alquiler. El próximo chorro que sepa que no voy a tener más plata”. “Fue a las 6 de la tarde, a plena luz del día. Para mi estaba re drogado, no sabía qué hacer. Yo sentía miedo porque el chico estaba como sacado, con los ojos desorbitados. Me dijo que me quedara quieta porque sino volvía y me quemaba, me quedé en shock como media hora”, cerró.
Fuente: Gentileza La Brújula 24.