El presidente Alberto Fernández aseguró este jueves que Bolivia respetará el contrato vigente en cuanto a la provisión de gas, lo que permitirá recibir 14 millones de metros cúbicos (MMm3) diarios como en 2021, y resaltó que en el caso de un incremento en la producción de los yacimientos del vecino país la Argentina “tendrá prioridad”.
Así se acordó durante el encuentro en Casa de Gobierno que el presidente Fernández mantuvo con Arce, tras el cual ambos anunciaron que Argentina contará con “volúmenes significativos de gas” importados desde el país vecino.
En el marco de la primera visita oficial de Arce a Buenos Aires, con una agenda centrada en temas energéticos y en la situación política de la región, los mandatarios avanzaron en diferentes puntos de la relación bilateral, entre ellas un memorándum para la cooperación en el desarrollo de los recursos de litio.
El encuentro se extendió por casi 3 horas, más tiempo del previsto originalmente, dado que -según comentaron fuentes oficiales- se trabajó “palabra por palabra” en los acuerdos, en una tarea a la que se sumaron los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Hidrocarburos boliviano, Juan Franklyn Molina Ortiz.
“El contrato vigente se mantiene en las mismas condiciones”, señaló el presidente Fernández durante la conferencia de prensa conjunta con el presidente de Bolivia, Luis Arce, en la Casa de Gobierno, tras una reunión que mantuvieron en esta primera visita oficial del jefe de Estado boliviano.
Este volumen resulta hasta un 50% superior a lo que llegó a ofrecer Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en las negociaciones desarrolladas durante los últimos meses.
Este volumen resulta hasta un 50% superior a lo que llegó a ofrecer Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en las negociaciones infructuosas desarrolladas durante los últimos meses con su contraparte local, la empresa estatal Integración Energética Argentina (Ieasa).
De esta manera, el pico de demanda de gas de la temporada invernal que se extiende de mayo a principios de septiembre permitirá reducir la compra de combustibles líquidos y Gas Natural Licuado para reemplazar el fluido boliviano que hasta hoy no estaba garantizado.
Fernández dijo que “en el caso de que Bolivia incremente su producción de gas, la Argentina tendrá prioridad”, aunque no se precisó aún los precios acordados en el caso del gas garantizado ni el eventual excedente que se genere a futuro.
De acuerdo a las estimaciones realizadas en las negociaciones que se llevaron adelante en los últimos días, de concretarse ese incremento por aumento de producción de los pozos o por la entrada en funcionamiento de otra área en desarrollo el total de has que se podría recibir sería de entre 16 y 18 MMm3/día. (Télam).