Los gremios de pilotos (APLA y UALA), así como la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), que agrupa al personal de tierra, más los técnicos de APTA y la Unión del Personal Superior (UPSA), motorizan la huelga que afecta hasta el momento a más de 7000 pasajeros.
“La empresa decidió no abonar la cláusula gatillo este mes, al 2018 le robaron un mes”, señaló el secretario de Prensa de la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (Upsa), Marcelo Urich, quien cuestionó, además, que no se hayan iniciado, como es costumbre, las negociaciones paritarias de 2019.
En diálogo con La Red, Urich explicó: “En vez de plantear una paritaria como corresponde, en septiembre, dijeron que la vamos a negociar en enero con lo que nos estarían comiendo otros cuatro meses de aumento salarial”.
Desde Aerolíneas Argentinas informaron que la medida consiste en la realización de asambleas en los principales aeropuertos, impidiendo el normal desempeño de tareas.
Las reuniones comenzaron a partir de las 7 de la mañana. Por esa razón, la empresa debió cancelar los vuelos que debían realizarse antes de las 10 de la mañana (los 57 antes mencionados).
Dadas las características de la medida, la operación no podría normalizarse antes de esa hora.
El vocero de la empresa, Marcelo Cantón, explicó que la paritaria de la compañía “venció el 30 de septiembre pasado” y que la cláusula gatillo “se disparó en mayo pero finalizó en agosto”.
Y concluyó: “Punta a punta tuvieron un aumento del 34%. Nuestra interpretación es que regía hasta agosto. Es un texto que no es tan claro.Pero les dijimos que si hay una diferencia sobre eso, que lo discutamos en la paritaria de 2019, que ya debería haber arrancado pero no logramos sentarlos a la mesa”.
Fuente: Cronista.