Luego de 21 años en el cargo, el polémico juez federal Norberto Oyarbide presentó hoy formalmente su renuncia, que le será aceptada por el presidente Mauricio Macri el próximo 15 de abril.
Oyarbide entregó su dimisión en persona al ministro de Justicia, Germán Garavano, quien inició el trámite para concretar su salida del Juzgado con “los pedidos de informes correspondientes”, aunque será el presidente Macri quien tendrá la última palabra al respecto.
“La renuncia se enviará al Presidente de la Nación para ser aceptada, lo que se espera que suceda al 15 de abril.
Mientras tanto, el juez Oyarbide continúa desempeñando sus funciones” en el Juzgado Federal 5, informó el Ministerio de Justicia en un comunicado.
Tras tomar esta decisión, el magistrado aseguró que “jamás” sintió “presiones” durante su cargo.
“No, no, jamás, jamás tuve presión”, subrayó el juez en declaraciones a la prensa, al ser consultado sobre esa posibilidad.
La renuncia del funcionario se produjo en medio de la polémica por las acusaciones de la diputada Elisa Carrió contra el presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, por actuar como presunto operador judicial del macrismo, que incluyeron una mención sobre sus supuestas reuniones con Oyarbide para pactar una “salida elegante” del magistrado.
Sucede que el juez se encuentra acorralado por las denuncias de mal desempeño en el cargo, con un juicio político en marcha en el Consejo de la Magistratura para removerlo del Juzgado, y era a su vez quien había procesado al actual presidente Mauricio Macri por las escuchas telefónicas ilegales.
La Comisión de Acusación y Disciplina del Consejo de la Magistratura lo había citado para que formulara su descargo en la causa en la que se lo acusa por haber frenado un allanamiento en una financiera tras recibir un llamado telefónico de Carlos Luizzi, segundo de Carlos Zannini en la Secretaría de Legal y Técnica en 2013.
Buenos Aires, NA.