El puerto operará con una menor carga transportada por trenes durante al menos dos meses, debido a los daños que las recientes inundaciones provocaron en los ramales ferroviarios que convergen en la ciudad, según confirmaron fuentes estatales y empresariales.
En algunos sectores, las vías fueron drenadas y ya se encuentran en uso, mientras que en otros aún se evalúan las condiciones de los terraplenes. Sin embargo, hay tramos donde el impacto fue total y será necesario encarar obras de infraestructura de gran envergadura.
Uno de los casos más significativos es el puente ubicado a la altura de la calle Don Bosco, una estructura de origen inglés construida antes que el canal Maldonado, que quedó fuera de servicio. Según trascendió, su reconstrucción demandará al menos dos meses.
Para acelerar los trabajos y reducir el tiempo de interrupción del servicio, el gobierno municipal inició gestiones con autoridades provinciales y nacionales, con el objetivo de reactivar lo antes posible el tránsito ferroviario hacia el puerto bahiense.
Por sus características, el puerto de Bahía Blanca es el que más carga recibe por tren en el país, por lo que esta situación generará un impacto económico que aún está en evaluación.
Mientras tanto, parte del transporte de mercadería será derivado a camiones, lo que incrementará el tráfico de estos vehículos en la ruta de circunvalación. Por ello, se están diseñando operativos de tránsito para minimizar inconvenientes en la circulación urbana.
Expertos señalaron que estructuras construidas por los ingleses entre finales del siglo XIX y principios del XX, que habían resistido diversas inclemencias climáticas, esta vez no lograron soportar la magnitud del fenómeno. Además, es la primera vez que las parrillas de vías del puerto de Ingeniero White quedaron bajo el agua.
Otro punto gravemente afectado es la vía que atraviesa el partidor del Parque de Mayo, que también requerirá una reconstrucción completa.