Las políticas económicas de Kirchner y su afición por buscar pelea con los países vecinos han causado un declive en el comercio de contenedores del país y con la elección de Mauricio Macri, el actual alcalde de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de tendencia centro-derecha, hay promesas de que vendrán días mejores.
Macri prometió grandes cambios en todos los frentes, incluyendo la mejora de las relaciones con los vecinos de América del Sur, los Estados Unidos y la Unión Europea.
“Va a ser muy interesante ver cómo el presidente Macri se ocupará de los muchos problemas que el régimen de Kirchner le ha dejado,” dijo Antonio Zuidwijk, un consultor de temas portuarios experimentado y muy respetado con sede en Buenos Aires, al corresponsal de JOC.com.
Estos temas incluyen políticas proteccionistas tales como restricciones a la importación y exportación, además de la inflación galopante de más de 20 por ciento y las disputas comerciales con sus vecinos Brasil y Uruguay. El gobierno también puso demasiado el foco en el mercado doméstico en vez de fomentar el comercio internacional, dijo Zuidwijk, que fue gerente de operaciones para la región de Argentina, Uruguay y Paraguay en la década de 1970 para Moore McCormack Lines de Estados Unidos, la empresa pionera que introdujo la “contenedorización” en la Costa Este de Sudamérica. Dijo que estas cuestiones han provocado la contracción del comercio de contenedores en Argentina debajo del nivel donde estaba en 1998.
El mayor puerto del país, Puerto Nuevo en Bueno Aires, que es responsable del 90 por ciento del comercio de contenedores del país, manejó 1,2 millones de unidades de 20 pies equivalentes (TEU) en el 2008. El puerto movilizó 997.000 TEU en 2014.
Esta disminución se produjo en tiempos en los que los movimientos de contenedores continúan creciendo en toda América del Sur. Por ejemplo, el puerto de Santos, Brasil, que ha superado a Puerto Nuevo a convertirse en la mayor puerta de entrada de contenedores del continente, puede pasar la marca de 4 millones de TEU este año, después de romper 2,5 millones de TEU en 2010.
El sector portuario de Argentina también debió lidiar con un enfoque estrecho para el transporte del gobierno saliente. “El problema aquí es que no hubo una política de transporte para el país en su conjunto y que nadie miró a la imagen completa, de la que los puertos deben formar parte”, dijo Zuidwijk. “La relación completa entre los puertos y el interior del país, el transporte por camión, por ferrocarril y el transporte marítimo y fluvial.”
El nuevo gobierno también debe cambiar las políticas para el uso de las vías navegables en el Río de la Plata, que se comparten con Uruguay, y trabajar junto con Uruguay para determinar la mejor manera de manejar toda la Cuenca del Plata, dijo Zuidwijk.
Otro aspecto positivo para la comunidad más amplia de los cargadores y los especialistas en transporte de la llegada al poder de Macri, es el deseo del nuevo presidente de Argentina para reforzar el bloque comercial de Sudamérica, el Mercosur.
Mercosur, que incluye a Brasil, Uruguay, Paraguay, Argentina y Venezuela, (y pronto a Bolivia) ha sido un organismo ineficaz en los últimos 10 años, lo que se ha debido en gran parte a la intransigencia de Argentina y la oposición al libre comercio bajo los Kirchner.
Durante más de 10 años, la UE ha estado tratando de forjar un pacto de libre comercio con el Mercosur, pero muchas veces Argentina ha demostrado ser la piedra de tropiezo. (Rob Ward. Corresponsal Especial de JOC.COM) (Adaptado al español por Fundación NUESTROMAR