Luego de afrontar distintos procesos legales y saldar una deuda de 55 mil dólares al momento de iniciar ese camino, Comercial empezó a reflejar en obras y apoyo a sus divisiones formativas el crecimiento que hoy es notorio en vísperas de su 108º aniversario, que tendrá lugar en poco más de un mes.
Pablo Reynafé, su presidente, nos visitó en los estudios de La Brújula 24 para recorrer el camino post-pandemia que ha impulsado con gestión y trabajo el despegue comercialino.
“Me vinculé al club en su momento en tiempos donde teníamos muchos juicios pendientes. Y a partir de ahí me quedé trabajando hasta asumir como presidente. La pandemia fue difícil de superar. Uno recuerda esos tiempos donde el club estaba cerrado y hoy es una alegría ver el movimiento que tenemos. Para eso, nos ocupamos de generar los espacios necesarios para tener muchos chicos y potenciar el fútbol y el básquet, que son nuestras disciplinas más fuertes”, destacó.
“Al mismo tiempo, fuimos gestionando recursos para encarar distintas obras. Con el aporte de los socios mantuvimos todos los gastos fijos y de mantenimiento, sumado a un aporte que nos hizo el Consorcio del Puerto en ese contexto de pandemia. Con ese apoyo hicimos el fogón nuevo y lo modernizamos por completo en todo sentido. Y este año, al tener los juicios prácticamente saldados, seguimos avanzando. Hay que tener en cuenta que, cuando empezamos, teníamos que afrontar 55 mil dólares de deuda…”, profundizó.
“Ahora estamos remodelando el acceso. Primero arreglamos el portón y ahora se remodelaron por completo los 57 metros de vereda. La idea es cambiar la cartelería y darle más etapas a eso. Hasta ahora hicimos mucha obra enterrada, como caños, cables, riego. Y ahora tenemos la posibilidad de hacer esto con fondos de la Fiesta del Camarón y el Langostino. El Koketo lo mismo; se invirtió medio millón de pesos en iluminación y arreglos para que quede como nuevo”, completó Reynafé.
Y cerró: “si hacemos un repaso en el básquet pasa lo mismo. Primero se reparó la cancha principal, después se ganó el proyecto para la cancha dos y ahora invertimos un millón de pesos en el techo del gimnasio. A su vez, la subcomisión encaró la obra del vestuario y todo el frente nuevo, con playón de acceso”.
“Todo esto siento que ahora se empieza a reflejar en lo deportivo. Comercial está creando sus propios jugadores para tener el día de mañana planteles propios en fútbol y básquet. Esa es la meta que nos pusimos”, concluyó.