Los principales productos del complejo sojero iniciaron hace más de un mes y medio un derrotero bajista en el mercado de Chicago, con caídas superiores al 10% en ese período que hicieron que el commodity estrella de Argentina perforara el piso de los US$ 500 por tonelada, debido a una sobreoferta mundial del grano y a pesar del desastre productivo histórico que sufrió nuestro país a causa de la sequía.
Más allá de esta baja prolongada, el mercado también está sujeto a jornadas de gran volatilidad, como las sucedidas la semana pasada, donde por cuestiones climáticas en EEUU el poroto repuntó en sus valores y se ubicó nuevamente en torno a US$ 500 la tonelada.
Desde el 17 de abril a la fecha, el contrato de referencia de la soja pasó de US$ 559 la tonelada a US$ 496 al cierre del viernes pasado, lo que implicó una caída de US$ 63, con un retroceso del 11,3%.
Por su parte la harina de soja marcó una baja del 14,6% (US$ 75) en dicho período para posicionarse en US$ 438 la tonelada, mientras que el aceite perdió 10,8% (US$ 132) y pasó de valer US$ 1.223 la tonelada a US$ 1.091 la tonelada.
En líneas generales, analistas y operadores del mercado explican las caídas en los valores debido a la oferta récord de mercadería de Brasil y un incremento en la superficie sembrada en Estados Unidos, aunque el clima en el país del Norte comenzó a jugar un papel preponderante en la definición de los precios de cara a la nueva campaña. (Télam).