Paraguay atraviesa un brote de chikungunya, una enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti, que también es vector de dengue, zika y fiebre amarilla. La particularidad de esta patología es el intenso dolor en las articulaciones, acompañado por fiebre, cefalea y dolor muscular.
En las últimas tres semanas el vecino país tuvo más notificaciones de chikungunya que de dengue: 5.625 casos contra 37. Otros números que arroja la epidemia que tiene como epicentro a Asunción, capital paraguaya, son: 71 personas hospitalizadas, de las que doce requirieron terapia intensiva; y además se registraron cinco muertes.
Ante este escenario, el lunes pasado el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible declaró contingencia ambiental por 60 días.
La frontera hace suponer que la situación sanitaria impactará inevitablemente en Argentina. De hecho, ya cinco provincias reportaron casos importados: Formosa, Ciudad de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, Chaco y Córdoba.
En este escenario, el Ministerio de Salud de la Nación lanzó una alerta epidemiológica por los arbovirus -la familia de los virus de dengue, zika y chikungunya-, en la que insta a los profesionales a tener en cuenta los síntomas y avanzar en un diagnóstico precoz, bloqueo y aislamiento del paciente. (Télam).