El sábado pasado abrió el museo toda la noche, en red con otros, por la Noche de los Museos. A la lógica de espectacularidad que supone una noche así, superpusimos intensidad y miniatura: inauguraba una muestra de más de 600 micro bordados, tomando cada una de las salas con imágenes de fitoplancton, contenedores del puerto, cartas de tarot, flora y fauna de la ría o lanchas de pesca hechas a puntadas.
La muestra sigue hasta abril del año que viene, ¡no se la pierdan! Es parte del proyecto colectivo que hace 3 años llevan adelante las participantes del Taller de Bordado Miniatura del museo, vecinas de White y Bahía Blanca de varias generaciones que mapean el mundo desde este puerto.
Cientos de personas que llegaron esa noche, además de mirar detenidamente sus bordados, podían tomar aguja e hilo y también intentarlo, porque las bordadoras mismas invitaban a multiplicar su práctica en un taller de bordado que siguió sin parar hasta la madrugada.
Al mismo momento, en el patio sonaban las pistas de Bedux o las cumbias de la banda Agua Destilada y bailar no estaba separado del olorcito a las rabas de Stella Maris que llegaba desde el patio delantero. ¿Pueden creerlo? ¡Las rabas también estaban bordadas en la muestra! porque a las bordadoras del museo no se les escapa una y porque el Mundo Bordado Miniatura es muchos mundos, redes de mundos que más allá de la noche siguen en movimiento.