Con expectativas renovadas y apuntando al servicio de primera que los caracteriza, La Siempre Verde ya cuenta las horas para la llegada de Semana Santa y el rol protagónico que ocuparán desde el punto de vista gastronómico, en “la clásica dirección del buen comer Siches 4041 de Ingeniero White”.
“Nos jugamos una gran patriada al poner en marcha esto, ya que el tema económico es complicado en el país y los números se han disparado en todos los artículos que compramos anticipadamente. Tenemos gente que viene de todos lados y pensamos que esta fiesta se va a desbordar porque la gente tiene ganas de salir y pasarla bien. Están dadas todas las condiciones”, sostuvo Tucho Ursino.
El horario de atención va a ser corrido de 10 a 23 horas, los días jueves, viernes y sábado, con el comedor al 50%. “Los precios todavía no los tenemos porque seguimos trabajando con los proveedores; los costos son muy inciertos y nosotros no queremos bajar la calidad de lo que ofrecemos. Apuntamos a un número real que nos sirva a nosotros y que también le sirva a la gente”, agregó.
“El menú está definido. Va haber cazuela, paella, rabas, cornalitos, papas fritas y volvemos con las empanadas. Queremos que la gente se vaya contenta y, si bien hace muchos años que hacemos esto, buscamos mejorar el servicio con un precio cómodo para el bolsillo de la gente. Esa es nuestra meta”, remarcó Néstor Somoza.
“Todos brindamos nuestro tiempo para estos días, entre los miembros de la comisión y las damas colaboradoras, junto al aporte de Montañeros de Santa María. Estamos contentos porque volvemos a un clásico de los whitenses. María Marzocca fue la que comenzó con la primer cazuela hace 31 años en el puerto; eran otro tiempos y había mucho entusiasmo en la localidad. Lo bueno es que pudimos mantenerlo en el tiempo”, repasó Tucho.
Incluso, para este año, La Verde pudo adquirir una cámara de frío propia fundamental para el tratamiento y la refrigeración de la mercadería.
“El evento empezó hace un par de meses para nosotros. Se maneja mucha mercadería y prácticamente compramos 4 mil kilos de pescado, el cual hay que procesarlo. Cada tarea tiene su organización, desde la cocina interna, la cocina que está a la vista con Delfín, la parte administrativa, la de las compras y la limpieza, que es otro aspecto en el cual somos muy meticulosos. El viernes siempre es el día que recibimos más afluencia de público, tanto al mediodía como a la noche”, graficó Somoza.
“Todo lo que genera la fiesta lo volcamos al mantenimiento de la institución y a los talleres culturales, los cuales están completos, con un clima extraordinario y 100% gratuitos”, cerraron.