Cada 15 de marzo se conmemora el Día Mundial de los Derechos de los Consumidores. Este año, la Membresía de Consumers International (200 grupos de consumidores en 100 países) seleccionó Fair Digital Finance (Finanzas Digitales Justas) como tema global.
Para 2024, se espera que los consumidores que utilizan la banca digital superen los 3600 millones. La proporción de titulares de cuentas que envían y reciben pagos de forma digital en el mundo, aumentó del 57% en 2014 al 70% en 2017. Las finanzas digitales brindan nuevas oportunidades, pero también implican nuevos riesgos que pueden conducir a resultados injustos para los y las consumidores, y pueden aumentar la probabilidad de que los más vulnerables se queden atrás.
Las tecnologías digitales están remodelando las formas de consumo. Hoy se realizan compras, pagos, se solicitan préstamos y se adquieren seguros de manera online. Sin embargo, en los últimos años y agudizada por la pandemia del COVID-19, aumentaron las formas de consumo digital, que exponen a estafas, fraudes y apropiación de datos.
Se requiere construir un mercado financiero digital que sea inclusivo, seguro, con protección de la identidad y sostenible, implementando técnicas de detección y prevención de apropiación de datos personales para lograr la maximización de la protección.
Cabe aclarar que las y los consumidores que utilizan estas nuevas prácticas digitales pueden ser víctimas de estafas, por lo que es sumamente importante consultar con organismos que brinden la información adecuada.