Gay aseguró que la cuarentena ha dado resultado como medida de protección: “el 30 de marzo teníamos 8 casos, el 11 de abril se habían duplicado, teníamos 16. En ese momento demandó 12 días la duplicación, ahora ha demandado 14, entre el 11 de abril y el 25 de abril (con 32 casos)”.
El intendente sostuvo que entre los afectados “no hay nadie mayor de 60 años y esto es un dato significativo y alentador desde el punto de vista de la recuperación. Nuestra ciudad ocupa el puesto 17 en cuanto a cantidad de casos en el territorio nacional, número proporcional a la relación con la cantidad de habitantes de todas la ciudades del país”.
Asimismo Gay aclaró que por el momento se decidió no habilitar las salidas de esparcimiento de una hora: “analizamos esta posibilidad con el Comité de Crisis y se llegó a la conclusión que por el momento no es prudente implementar esta medida para no arrojar por la borda todo lo que hasta ahora dio resultado”.
Dejó en claro que se consideró la logística, el modo de control, horarios, diferenciación por grupos “y no era conveniente concretar esta propuesta que requiere un protocolo propio y consensos”.
“Se efectuaron interconsultas con profesionales y otros municipios y se optó por comunicarle al gobernador Kicillof que al menos hasta el 10 de mayo Bahía Blanca no adherirá a esta iniciativa, al igual que otras comunas”, mencionó.
En tanto, sí confirmó que fueron habilitadas nuevas actividades de excepción en la ciudad. Consultarlas aquí.
Gay aseveró que “hoy comenzamos una nueva etapa en este proceso tan particular, que implica algún cambio, nada sustancial, pero sí con la convicción de continuar por este camino que ha brindado resultados”.
Recordó a la comunidad la importancia de respetar las medidas básicas (lavado de manos, utilización de protección facial, distanciamiento social) que son “elementales y la mejor herramienta para enfrentar a esta pandemia”.
Finalmente el intendente ponderó y agradeció a quienes cumplen con el aislamiento así como el trabajo que lleva adelante en este período personal de sanidad, de seguridad, voluntarios, empleados municipales y ongs.
“Todos ellos están en la primera línea enfrentando esta situación, cuidándonos. Y entendemos la importancia de la gente que está en los barrios para llevar alimentos”, concluyó Gay.